CHILPANCINGO, GRO.- El ayuntamiento de San Miguel Totolapan, en la Tierra Caliente, declaró toque de queda como medida para reducir la movilidad ante el repunte de contagios y decesos por COVID-19, así como el incremento en la ocupación hospitalaria.

En la misma región, la alcaldesa de Tlapehuala, Anabel Balbuena Lara, reprochó a los pobladores el incumplimiento de las medidas sanitarias y advirtió que en la Tierra Caliente hay desabasto de oxígeno y medicamentos.

Los hospitales, dijo, están llenos. La pandemia en Guerrero está llegando a sus niveles máximos. Ayer, el secretario de Salud, Carlos de la Peña, informó la cifra más alta de muerte desde marzo: en 24 horas fallecieron 34.

Desde enero, tras la celebración de la Navidad y el Año Nuevo, los contagios y muertes van en aumento: en promedio fallecen 19 personas al día.