El deterioro de las rejillas que se colocaron en el Rastro Municipal fue la causa para que de nueva cuenta las autoridades detectaran residuos sólidos de la actividad en ese sitio, dio a conocer el director de Ecología y Medio Ambiente, Pedro Valdez Moncada, quien señaló que están en proceso de integrar el expediente para canalizarlo al juez, quien determinará si aplica alguna sanción.  

Valdez Moncada recordó que en agosto pasado, cuando se dio una problemática similar, se ordenó la colocación de unas cribas o rejillas con el fin de evitar que residuos sólidos se filtraran a la red de drenaje sanitario, porque pudiera taponearlo y emerger, como sucedió.

“A la hora de la inspección, la semana pasada, se detecta que estas rejillas que se habían colocado ya presentaban algunas fracturas o daños y eso de manera eventual permitió el paso de residuos sólidos más gruesos y ocasionó el taponeamiento del drenaje sanitario que está a un lado del rastro”, explicó Valdez Moncada. 

Agregó que en esta ocasión no hubo problemas con el drenaje pluvial, pero sí los restos sólidos fueron detectados en los desagües sanitarios, hasta el pozo de visitas ubicado a un costado del Parque Industrial La Amistad. 

Pedro Valdez comentó que cuando detectaron la problemática detuvieron la actividad de sacrificio, sin embargo, se reanudó una vez que colocaron nuevas rejillas para cumplir su tarea de contención y evitar más problemas. 

“Todo esto se le da vista al juez municipal para que imponga las medidas que considere, ya sancionatorias. Puede ser una multa o el retiro de la licencia, de acuerdo con la gravedad que le comprobemos al juzgado municipal”, indicó el director de Ecología.

Además, Valdez Moncada dijo desconocer en su área y en jurídico municipal la existencia de algún amparo contra la sanción aplicada por la Secretaría de Salud por lo acontecido el año pasado en el rastro; indicó que en todo caso a eso le correspondería al concesionario, es decir, a la empresa Maquiladora y Exportadora de Carnes.

Antecedentes
> En abril de 2016 se registró una fuga de sangre que cubrió de rojo la carretera a Zacatecas, a la altura de las colonias Santa Elena y Lomas de Refugio.