Pídale a la gente que describa el estilo de juego del Swansea y la mayoría va a hablar del enfoque fluido, basado en posesión del balón, que ha sido la marca del equipo bajo técnicos como Roberto Martínez, Brendan Rodgers y Michael Laudrup en los últimos 10 años.

Algunos incluso le han apodado "Swanselona", en referencia al estilo preferido del Barsa.

Pero la llegada del técnico Bob Bradley señala un cambio.

El estratega estadounidense fue contratado por Swansea la semana pasada, para tomar las riendas de un equipo que había perdido cinco de sus últimos seis duelos en la liga Premier inglesa bajo el despedido Francesco Guidolin y languidece 17mo en la tabla.

Bradley, de 58 años llega con una reputación de preferir un estilo más pragmático y directo de fútbol, completamente diferente a lo que usualmente produce el equipo galés. Un cambio de enfoque pudiera ser exactamente lo que necesita el plantel para no descender esta campaña.

A Bradley le llega su bautismo de fuego en la liga el sábado ante Arsenal, que ocupa el tercer lugar y llega con excelente forma y un ataque que parece haber cuajado finalmente.

Arsenal ha ganado sus últimos cinco partidos en todas las competencias y puede ser devastador cuando su línea frontal — con jugadores como Mesut Ozil, Santi Cazorla, Theo Walcott y Alexis Sánchez — tiene espacio para operar.

Pero el equipo de Arsene Wenger puede verse frustrado cuando sus rivales esperan atrás y defienden en masa. Bradley, un técnico experimentado, valora mucho el trabajo de equipo y eso será lo necesario para Swansea en su visita al Emirates Stadium.