De caer ante México, Haití podría quedarse sin patrocinio para sus jerseys a la hora de jugar futbol.

Saeta, marca colombiana que patrocina a los isleños desde el terremoto del 2010 de manera gratuita, podría quitarle la obtención de sus uniformes por las bajas ventas de la playera que porta con orgullo el cuadro caribeño.

“Es un placer portar estas playeras, nuestro patrocinador nos apoya mucho. Tenemos la esperanza de estar en la final y que eso ayude a que se vendan más playeras”, cuenta Derrick Ettiene, jugador de la Selección de Haití y del New York Red Bulls.

Justo en 2013 se dio un acuerdo de inversión de un millón de dólares para vestir a Haití. En la venta, se donan alrededor de tres dólares por jersey, 70 por ciento de lo que vale cada camiseta vendida. Lo negativo es que sólo se comercializan 500 fuera de competencias oficiales y mil cuando se disputan torneos como la Copa Oro.

“Un patrocinio es costoso y nosotros somos una mediana empresa en Colombia, apenas tenemos 70 personas trabajando, y un equipo de futbol necesita mucho dinero. Cuando no se venden muchas camisetas, esa inversión no se alcanza a recuperar, por eso hemos pensado en dejarlos de apoyar o reducir la inversión, para que haya algo de retorno para nosotros. Mientras más camisetas se vendan, más se puede justificar el gasto”, confiesa Viviana Carrero, directora de innovación de Saeta.

Después de haberlos rescatado de pasar vergüenza en un amistoso ante España cuando Haití no tenía uniforme ni marca que los patrocinara, ahora tendrá que jugarse contra México no sólo su pase a la gran Final, sino hacer que perdure su auspiciador.