Los datos de la aplicación Apple Health se utilizan como evidencia en un juicio sobre la violación y el asesinato de una mujer de 19 años en Alemania. El individuo acusado del crimen es Hussein K., un refugiado afgano, que ha estado en juicio desde septiembre.

El juicio se ha complicado por el hecho de que aspectos de la vida de Hussein no son claros, incluyendo su edad real y un período de tiempo -cuando se cometió el crimen- durante los cuales se desconoce su paradero.

Hussein, que posee un iPhone, se negó a dar a las autoridades su código cuando fue arrestado. Sin embargo, los investigadores contrataron a una empresa local, que fue capaz de obtener acceso al dispositivo. Luego buscaron sus datos de Apple Health y pudieron conocer más detalles sobre sus actividades ese día, como la cantidad de pasos que dio y el tipo de actividades en las que estaba involucrado.

Las autoridades están particularmente interesadas en la actividad registrada como "subir escaleras", que se correlaciona con el tiempo durante el cual Hussein pudo haber estado arrastrando a su víctima por un terraplén del río, y luego volviendo a subir después de deshacerse de su cuerpo. Los investigadores replicaron estos movimientos y descubrieron que la aplicación Health registraba la información de la misma forma que se mostraba en su iPhone.

El derecho a tus datos digitales

Aunque Apple no fue llamado para ayudar a acceder al iPhone de Hussein, en esta ocasión, de alguna manera, el caso recuerda la batalla de 2016 entre Apple y el FBI sobre si debería ayudar a piratear el iPhone perteneciente a un terrorista de San Bernardino, en la búsqueda para evidencia digital.

Con información de Cult of Mac