Padres de familia de la primaria Jesús Ochoa Ruesa cerraron las instalaciones del plantel, debido a que desde hace más de un mes se encuentra sin luz eléctrica y no han recibido atención por parte de las autoridades de educación.

Los padres amenazaron con cerrar los bulevares principales si la Secretaria de Educación no resuelve de inmediato la situación.

Desde el pasado 16 de abril, el cableado de luz eléctrica de la escuela, ubicada sobre el bulevar Mirasierra, en la colonia Nuevo Mirasierra, fue robado. Aunque la directora reportó de inmediato, para el 19 del mismo mes, los ladrones ingresaron nuevamente a la institución y se llevaron hasta los medidores.

“Se metieron a robar al kínder, aquí a la primaria y a la secundaria desde el 16 de abril, pero aquí a la primaria se metieron otra vez el martes 19. Ya hicimos el reporte, pero en secretaría nos dicen que los gastos de reposición son muy altos y secretaria de finanzas no ha autorizado porque son alrededor de 11 mil pesos”, expresó Enriqueta Córdova Valdés, directora de la escuela, aunque los padres señalaron que son alrededor de 30 mil pesos.

La directora añadió que trabajar sin luz ocasiona también que no haya agua en la institución, pues la bomba no funciona, por lo que desde el día del robo piden agua a los vecinos para poder mantener los sanitarios limpios, de no ser así, ya se habría convertido en un foco de infección para los menores.

Esto, dijo, no sólo afecta a los más de 200 estudiantes del turno matutino, sino también a los del turno vespertino.

Mientras las puertas de la escuela continúan cerradas, algunas maestras dan clases a los estudiantes en la banqueta del plantel.

Hasta el momento, las autoridades de la secretaria de educación no han acudido a atender la situación.