Habitantes de fraccionamientos del norte de Saltillo rechazaron tajantemente que las obras de remediación para aliviar las cada vez más peligrosas inundaciones pluviales en esa zona de la ciudad se construyan en un tramo de más de 3 mil metros a partir del Bulevar José Musa, como, aseguraron, lo propone el municipio.

Para hallar una solución, se pusieron sobre la mesa dos alternativas, una a lo largo mil 167 metros, a partir de la calle Álamo Gordo cruce con De los Sauces, en Los Molinos, y otro tramo de mil 305 metros, a partir del bulevar José Musa de León, hacia su conexión con el Arroyo Ceballos, que es identificada como opción A.

En la B, se proponen las obras sobre mil 217 metros, igualmente a partir del mismo punto en Los Molinos, y otro tramo de tres mil 120 metros, igual, a partir del Musa, para desembocar también en el Arroyo Ceballos.

Ambos proyectos son parecidos desde su inicio y hasta el Musa, sin embargo, a partir de esta vialidad, es donde cada uno toma un camino distinto.

Integrantes de la agrupación Alianza de los Arroyos, integrada por 18 colonias, aseguraron que la alternativa A es la más viable, y cuestionaron por qué en el municipio “se aferran” a optar por el recorrido B.

“Somos vecinos afectados no por la naturaleza, sino por las decisiones de autoridades”, expresó Natalia Muro.

Por su parte, Alejandro Argüelles precisó que el trazo que ellos consideran más viable implica afectaciones menores a propiedades y se basa en lo que es el cauce natural del arroyo Cuatro Bajo, que desemboca en el Ceballos.

Dijo que el proyecto que aseguran defiende el municipio, a diferencia del A, ingresa por colonias como Nogalar del Campestre, Capellanía, Loma Blanca, entre otras, lo que implicaría más afectaciones, indemnizaciones y tiempo para la realización de las obras.

“Y lo que muestran los mapas nos dice que se están yendo por el otro lado, es decir, en contra completamente de lo que es el flujo y el cauce natural”, recalcó.

Ernesto Elizalde, por su lado, advirtió que, además, con la alternativa B, se estaría encauzando, hacia las colonias mencionadas, el agua de tres arroyos (sumando los afluentes de El León y el Blanco) que se unen al Cuatro, tierras arriba.