El grupo Nissan recurrió a grupos bancarios nipones para conseguir una línea de crédito por casi 4,600 millones de dólares a fin de cubrir necesidades de liquidez ante la crisis que vive el sector, informó el diario financiero Nikkei. 

El diario, que no cita las fuentes de la información, dice que el sindicato de bancos involucrado en la operación está liderado por Mizuho Bank, y la financiación que está buscando Nissan asciende a unos 500,000 millones de yenes (4.230 millones de euros/4.591 millones de dólares). 

Al igual que otras firmas del sector, Nissan se vió forzada a suspender sus operaciones en múltiples países, tanto por los problemas de producción a causa de la pandemia de coronavirus como por la baja demanda de vehículos. 

Pero, según Nikkei, Nissan tiene menos disponibilidades de liquidez que, por ejemplo, Toyota, el segundo grupo del sector a nivel mundial, y que también mantiene paralizadas líneas de producción. 

Y teniendo en cuenta que el impacto del COVID-19 y sus efectos en la demanda se van a prolongar, Nissan optó por pedir asistencia financiera. 

Además de Mizuho Bank Nissan está buscando fondos en otros dos bancos privados, el Mitsubishi UFJ y Sumitomo Mitsui Banking Corporation (SMBC), así como el estatal Banco de Desarrollo de Japón. 

Nissan no ha hecho comentarios públicos sobre esta operación, que en Japón suele conducirse con gran reserva hasta que se definen los detalles. 

A pesar de que Toyota está en mejor disposición de liquidez, el gigante nipón también ha recurrido previamente a un financiación adicional por un valor que es el doble de lo que está buscando Nissan. 

Planea prescindir de unos 10,000 trabajadores de EU

La firma automovilística japonesa Nissan planea prescindir temporalmente de unos 10.000 empleados de sus fábricas de Estados Unidos (EU), como parte de las medidas que han forzado a la compañía a reducir su producción por la pandemia de coronavirus, informó el diario financiero Nikkei. 

De acuerdo con Nikkei, la suspensión de empleo afectará a casi toda su fuerza laboral en dos fábricas de Tennesse y otra de Mississippi. 

Al igual que otras firmas del sector, Nissan se vió afectada por la baja demanda de vehículos y las restricciones en la producción a partir del brote de coronavirus, lo que está forzando a las compañías a suspender sus actividades hasta que se superen ambas causas. 

En Estados Unidos, Nissan decidió recientemente extender el cierre de sus fábricas hasta finales de abril, vigente desde el 20 de marzo, a causa de la extensión del COVID-19. 

Una fuente de Nissan USA no confirmó a Efe el número de empleados que pueden ser suspendidos temporalmente, pero recordó que en Estados Unidos sus fábricas permanecen cerradas y seguirán así hasta fines de abril. 

"La compañía está implementando suspensiones temporales de empleo para permitir gestionar el negocio ante la reducción de la actividad", agregó la fuente. 

"Los empleados que se vean afectados -añadió- podrán solicitar apoyo gubernamental como beneficios de desempleo especiales". 

Nissan ya había informado el mes pasado de su intención de presentar un Expediente de Regulación Temporal de Empleol para unos 3,000 trabajadores de sus plantas en Barcelona (España) y de otros 6,000 en el Reino Unido.