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Coronavirus: Cómo llevarte bien con tu hermano durante la cuarentena en casa
Permanecer en casa el mayor tiempo posible, es una de las recomendaciones emitidas por las autoridades de salud ante la pandemia del COVID-19. La suspensión de clases ha causado que los hermanos se vean obligados a estar en casa más tiempo de lo común.
Sin embargo, algunas ocasiones convivir tanto con una persona puede llegar a ser complicado, más si se trata de hermanos.
KidsHealth from Nemours es una organización sin fines de lucro dedicada a mejorar la salud de niños y adolescentes. Esta asociación con sede en Jacksonville, Florida, comparte una serie de recomendaciones para evitar problemas entre hermanos y mejorar la relación.
Los motivos por los que puede darse una pelea entre hermanos son innumerables y van desde lo más típico. Por ejemplo, tomar cosas ajenas sin permiso o regresarlas en malas condiciones.
La edad también es un factor, a veces los hermanos menores generan la idea de que los hermanos mayores pueden hacer todo lo que quieran, a diferencia de ellos. En cambio, los mayores suelen pensar que el menor es el consentido y que la atención familiar gira entorno a él.
Especialistas explican que la competencia entre hermanos es normal, siempre y cuando esta sea un motivante para esforzarse a ser mejor en sus distintos entornos. Pero deja de ser sano cuando existe un exceso de rivalidad, se generan discusiones y se complica la convivencia familiar.
El primer paso es hablar entre la familia sobre cómo se sienten sus integrantes. Es importante hacerlo de forma tranquila y sin perder la postura. Esto puede mejorar mucho las cosas, pues quizá algunos miembros no están enterados del sentir de los otros.
Otras recomendación es enfocarse en superarse a sí mismo antes que compararse constantemente con los hermanos.
Por otro lado, existen diversas situaciones que se prestan para que la frustración, desesperación o los celos lleven a perder la paciencia. Para evitar esto, expertos recomiendan lo siguiente:
Respirar profundo y reflexionar sobre lo que ocurre, tratar de resolver si es enojo con la otra persona o solo frustración por las cirsunciancias.
Hay que recordar que las cualidades y virtudes pueden ser distintas entre todas las personas, y eso no que alguien sea menos o más.
Es importante que las discusiones no escalen a las agresiones físicas, mismas que pueden desprenderse de los insultos y descalificaciones. Ante esto, la sugerencia es hablar con los padres o un adulto de confianza. De ser necesario, solicitar apoyo de un psicólogo, psiquiatra, terapeuta o trabajador social.