El jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera Espinosa, reconoció la labor de los legisladores de la Asamblea Constituyente, los cuales dijo trabajan para construir una Constitución Moderna que le dará identidad a la ciudad y a sus habitantes.

Comentó que actualmente se vive un panorama complejo a nivel mundial del cual la ciudad no escapa, por lo que es momento de darse cuenta que la cercanía y el contacto con la población es una de las tareas principales de los que dirigen la administración pública.

Mancera Espinosa indicó que no debe temerse al proceso que se vive, es claro dijo, que en las sociedades hay momentos clave y la Ciudad de México ya no volverá a ser la misma con la Reforma Constitucional por que se lucho durante décadas y que hoy es una realidad.

"Hoy se preguntan si se terminará o no el trabajo en tiempo porque fue quizá poco el tiempo que se le dejó al Constituyente. Eso lo determinará el Constituyente y si necesita más tiempo, también lo determinará. Esa no es la parte fundamental, claro que lo importante es que se concluyera en los plazos en que se han marcado; pero lo más importante para la Ciudad de México es que tenga ese documento fundacional, ese documento que nos dará una identidad y un rumbo claro hacia dónde vamos".

El mandatario capitalino sostuvo que el fin es generar condiciones de bienestar y espacios de convivencia, no quedarse estacionados sin progreso. 

"No debe asustarnos el hecho de que haya planteado o que se hayan planteado anhelos ahí en la Constitución, por el contrario, me parece que son muy válidos y muy debatibles y además, es lo que genera el cambio".

Mencionó que los Constituyentes son mujeres y hombres que conocen bien la Ciudad de México, que han luchado y trabajado por el derecho de sus habitantes y que hoy tienen el privilegio de participar en la redacción de lo que será el instrumento que fundará la vida moderna de la capital de la República Mexicana.

Dijo confiar en los resultados de la Constitución Política de la Ciudad de México y reconoció que durante su redacción prevalecerán los debates, los desacuerdos y las coincidencias, pero todo es parte del proceso.

"Hoy tenemos una tarea muy importante. Hoy debemos de construir democracia, democracia que dé confianza. Democracia, estoy cierto, que no sea paternalista, pero democracia que sí permita la conducción precisa de un gobierno que quiere cada vez estar mejor, más cercano con los ciudadanos, más cercano en la participación, en el progreso, en el desarrollo, en el impulso de una ciudad que realmente tiene tintes de país, de una ciudad que tiene una gran complejidad en su administración y, por supuesto también, en la línea de conducción diaria.

La Constitución de la Ciudad de México consideró será un ejemplo a seguir  y subrayó que cuando se habla de la necesidad de transformación a través de las fuerzas, del impulso del pueblo, cuando se llega a una frontera entre la centro-izquierda y el centro-derecha y a veces esta se pierde en el debate, es cuando se refuerza el trabajo que va encaminado al progreso.