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Constelaciones: curando el pasado para mejorar el presente
Las constelaciones familiares son un método terapéutico alternativo que busca, a través de la identificación y resolución de conflictos en los sistemas familiares (a veces yendo varias generaciones hacia el pasado), sanar los conflictos, problemas, e incluso enfermedades que alguien padece.
Esta técnica fue desarrollada y popularizada durante los 90’s por el psicoterapeuta alemán Bert Hellinger, con influencia de varias corrientes psicológicas y sistemas filosóficos y de pensamiento de la tribu Zulu, y nosotros tuvimos la oportunidad de platicar con Mariano Cabrera, uno de los practicantes de esta terapia, un “constelador”, que actualmente está ofreciendo un diplomado de formación en la ciudad, en la Casa del Gurú Ram Das.
“Esta técnica muestra y ayuda a sanar al ser humano los conflictos individuales que son un espejo de lo que sucede en la familia. No estamos exentos a lo que sucede al interior. Nosotros vamos de generación en generación”, explicó el terapeuta.
“Es una técnica que usa la fenomenología, los campos morfogenéticos y el trabajo con ‘el campo’. Un espacio donde reúnes a varias personas y esas personas se conectan al inconsciente de los ancestros, tanto vivos como muertos y donde tú puedes ver los patrones y situaciones que quedaron inconclusas”, continuó.
Mariano comentó que la base de esta filosofía es la hipótesis de que los conflictos no resueltos de nuestros ancestros son heredados y el individuo en el presente busca resolverlos de una u otra manera, generalmente a través de actitudes negativas o autodestructivas e incluso como una respuesta física en la forma de una enfermedad.
“Por ejemplo, si en mi familia ha habido muchos divorcios, mucha viudez, para las futuras generaciones les va a ser muy difícil tener una relación de pareja plena, porque sería como traicionar a la familia”, argumentó.
“Heredamos algo por amor al ancestro y le decimos de forma inconsciente, yo, como tú, vivo esta historia o yo por ti. En vez de que tú lo vivas lo vivo yo”, dijo, y ejemplificó de nuevo con lo siguiente: “La esquizofrenia, comúnmente, es provocada por asesinatos entre los mismos familiares en tatarabuelos. El dolor, lo que vive el esquizofrénico habitualmente es esa necesidad de reconciliarlos, de unirlos”.
Nos comentó el caso de una paciente que “me mencionaba que su bisnieta nació con una deficiencia intestinal que la tiene conectada a aparatos. Nos fuimos a trabajar con lo que ha sucedido en cuestión de la maternidad. La señora, cuando empecé a indagar, a preguntar, me dice que a su esposo lo mataron en la revolución cristera. Y, de hecho, mi bisnieta tiene la cara de mi esposo”.
Al respecto ahondó y explicó que “entonces, lo que pasa es que los sistemas familiares están involucrados con otros sistemas familiares, de manera que podemos beneficiar a alguien o perjudicarlo. Entonces, si yo hago algo indebido y no me responsabilizo, esto lo paso a otra generación y alguien más se va a hacer cargo de eso”.
Aunque este método terapéutico es considerado una pseudociencia por algunos expertos en psicología, dado que no se han publicado documentos e investigaciones serias sobre su efectividad, Cabrera nos explicó cuáles son las tres posibles explicaciones que se han arrojado sobre cómo existen estas relaciones familiares y porqué funciona el método.
“Una explicación, que está en la biología, por Rupert Sheldrake, científico y biólogo, que descubrió los llamados campos morfogenéticos. Los animales aprenden en una generación dónde vivir, qué agua tomar, qué hierbas comer y se genera un campo a través del código genético que se transmite”, expresó.
“Otra forma de explicarlo sería por amor. Hay dos grandes fuerzas, el miedo y el amor. Si lo vemos desde el miedo es ¿qué culpa, qué mal hice y cómo lo tengo que pagar? Si lo vemos desde el amor es por el amor que le tenemos. ¿Cuántas veces un padre no ha dicho que preferiría él estar enfermo y no su hijo, para que no sufra? Lo mismo hacemos, de forma inconsciente, con nuestros ancestros”, continuó.
“La otra es la transferencia, que existe en el psicoanálisis. Yo, por ejemplo, como padre, si me siento solo, necesitado, estoy mandando un mensaje y llega al hijo y él va a querer ayudarme a mí, enfermándose o haciéndose cargo de mi, pero si se hace cargo de mi, no tendrá pareja y triunfará en la vida. Por eso muchos hijos no pueden salir, crecer, porque se hacen cargo de sus padres”, concluyó.
Bajo el mismo supuesto de que las cargas de nuestros ancestros nos afectan le preguntamos qué tipo de acciones podemos tomar para evitarle estas penas a nuestros descendientes.
“Una invitación que puede ayudar es a que ocupes el lugar que te corresponde. Si tú eres hijo, ser hijo, no hacerte cargo de los demás o de tus padres, si eres pareja, ser pareja, estar en ese lugar. La bronca es cuando te sales te descolocas de tu lugar, a veces siendo jefe te está mandando alguien más, por ejemplo, hay que ser conscientes del lugar que ocupamos pero respetando el orden”, respondió.
También le pedimos su opinión respecto a un tema que aqueja a la sociedad coahuilense, el suicidio, y cómo, desde esta terapia podría ser tratado.
“Este tiene dos vertientes principales, una es que alguien de mi sistema familiar le quitó la vida a otra persona, la pregunta que hace la consciencia humana es ¿quién va a pagar por eso? Cuando no se hace cargo esa persona, no se responsabiliza de los daños, alguna persona de las futuras generaciones se va a quitar la vida para querer compensar ese agravio que se hizo”, explicó.
Asimismo le cuestionamos sobre la importancia de la salud mental en nuestros días, él comentó que se trata de un tema que no es considerado con seriedad por los mexicanos y que por lo mismo las autoridades no le dan importancia ni lo han hecho parte de los programas de seguridad social, a diferencia de otros países.
Mariano Saucedo
> Es psicoterapeuta y constelador familiar
> Tiene estudios en psicoterapia Gestalt y es también tanatólogo
> Se le puede contactar a través de su página de Facebook “Mariano Cabrera”
> Ofrece consulta en su consultorio de Monterrey, en Casa del Gurú Ram Das una vez al mes y a través de internet.