Alejandra, estudiante de Administración, ha visto las dos caras de LOUD, como asistente y como parte del comité. El congreso se organiza desde cinco meses antes, muchos jóvenes desertan pero los que quedan saben que los sacrificios, como olvidarse de sus vacaciones, valen la pena.

Luces, asistentes buscando un lugar para sentarse, coffe break, conferencistas preparándose detrás del escenario para salir y una decena de mensajes viajando entre los radio comunicadores de cada miembro del staff, pareciera que todo es como un reloj suizo en los que cada persona hace su trabajo para que los sueños se conviertan en realidad.

LOUD significa que los sueños se pueden hacer realidad, así lo confesó Alejandra de Río Muñoz coordinadora del comité de medios de comunicación en el congreso. 

Además de que la palabra LOUD es sinónimo de liderazgo, durante nueve años ha servido como escuela y plataforma para todos aquellos que han desfilado en el comité organizador. 

La tarea no es sencilla, el reto es enorme y trae consigo una serie sacrificios desde cinco meses atrás, muchos entran y pocos son los que sobreviven a este camino, donde el tecnológico pone las herramientas necesarias para que sus alumnos se encarguen de volver a LOUD una realidad que en este año repercutirá en los 800 asistentes inscritos.

Alejandra se enamoró de lo que pasaba alrededor del evento, la primera vez que asistió lo hizo como público y la labor del Steffi corriendo de un lado a otro, organizando y trabajando la hizo prometerse ingresar al comité el año siguiente.

El dato
> LOUD 2016 es la segunda edición en la que Alejandra participa, fue ella quien compartió a nombre de todo el equipo el agradecimiento a su alma mater por permitirles una experiencia inolvidable