Con ‘Otoño; Nubla gris’, Enrique de Leo regresa a su Saltillo natal

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Con ‘Otoño; Nubla gris’, Enrique de Leo regresa a su Saltillo natal

Foto: Francisco Muñiz/VANGUARDIA.
El actor emigró de la ciudad para perseguir su carrera en el teatro y ahora, por primera vez, se presentará en la capital de Coahuila gracias a Teatro Garnica

Claudio vive con miedo, con una ira acumulada y recuerdos amargos de su pasado que, aunque no se atreve a admitirlo, le pesan y se convierten en un lastre para vivir al máximo su presente. Un consultorio de psicoanálisis y una pintura crearán la ocasión idónea para que exprese aquello que por tanto tiempo ha guardado en su interior.

“Otoño; Nubla gris”, es un espectáculo unipersonal de teatro en formato corto, escrito, dirigido y protagonizado por Enrique de Leo, actor nacido en Saltillo pero cuyos estudios y carrera se han desarrollado en la Ciudad de México y a partir de este fin de semana debutará en los escenarios de su ciudad natal.

Será una breve temporada que inicia este viernes 6 de agosto en punto de las 20:30 horas en Teatro Garnica y continuará los días 7, 13 y 14 de agosto en el mismo horario. con un colaboración de 150 pesos por persona, cupo limitado, y una duración de 25 minutos.

Esta breve pero impactante historia está basada en el género del microteatro, sobre el cual Enrique de Leo, en rueda de prensa, nos habló más al respecto. 

“surgió en Europa, en Madrid, a principios de la década pasada. Básicamente consistía en hacer obras de teatro en una casa que se habituaba cada habitación como un escenario. Entonces eran cinco habitaciones, cinco obras de teatro, y el público veía una obra, que duraba 15 minutos, en un espacio de 15 metros cuadrados, con 15 personas en el público, e iba de habitación en habitación viendo las obras”, explicó

“Trajeron ese concepto a México en el año 2013, más o menos, y ahí empezó el microteatro en el país. Mucha gente lo vimos, empezó a causar revuelo y no quisimos quedarnos con las ganas. Tomamos este concepto y lo transformamos”, agregó, “este concepto que traigo se llama Teatro en Formato Corto, que es una obra pequeña, una historia pequeña de contar, dura veinticinco minutos y en un espacio también reducido, como teatro del close up, que puedas ver al actor de cerca”.

El texto —escrito y montado en 2016 y desde entonces en temporada hasta la pandemia— aborda temas íntimos y pretende ser un espejo para el público, ya sea que se identifiquen directamente con las situaciones que Claudio, el protagonista, ha vivido o con la circunstancia de no poder o no saber cómo expresar aquello que se está clavando en el interior.

“Yo la escribí pensando en la enfermedad emocional. Creo que la enfermedad emocional puede derivar en trastornos de alimentación, de ansiedad, de adicción. Sugiere, lo menciona, estos dos temas, de la alimentación y la adicción, no se mete con ellos, no son el tema de la obra pero creo que sí es importante que… las personas a veces no sabemos cómo manifestar nuestras emociones, no somos capaces de decir lo que traemos dentro, que sabemos qué es pero nos cuesta trabajo y creo que Claudio sí se atreve, le cuesta trabajo pero al final lo hace. Y eso lo agradece la gente porque es como un portavoz y creo que logra esta empatía con el público”, señaló el autor.

Con una propuesta escenográfica minimalista, el peso de la obra recae en la actuación de De Leo, quien le da vida a Claudio y a sus emociones reprimidas, en una puesta en escena con casi 5 años de vida y tiempo suficiente para madurar en más de un sentido.

“El teatro está vivo, es un organismo vivo, y la gente ayuda a eso. Entonces a veces el público no es el mismo, o yo tal vez no estoy de humor, pero no importa, porque necesito entrar, entonces se da diferente. Pasa de todo, pero lo importante es que puedas transmitirle a la gente y lo vas a lograr a través de esa madurez que está teniendo la obra en cuestión de trazo, de montaje”, concluyó el actor.