La salud del pequeño Iker Misael Ulloa, quien fue mordido en el cuello por un perro Pitbull se complicó; los médicos le detectaron daño cerebral, sin embargo harán un esfuerzo crucial para tratar de salvarlo.

Ayer los galenos dieron los pormenores del proceso que lleva el niño en el Hospital Universitario a la familia del “Chinito”. Su esperanza se basa en el resultado que dé un electroencefalograma.

Al menor lo mantienen en cuidados intensivos con un respirador y una sonda en los pulmones.

El subdirector médico, Jorge Serrano y el jefe de pediatría José Guadalupe Rosales, informaron que el Iker presentó una serie de cambios de comportamiento cerebral.

Ayer tenían planeado practicarle el electroencefalograma, sin embargo el efecto de la anestesia se los impidió, por lo que hoy sí se podría llevar a cabo.

En la mini conferencia se mencionó que la familia habría aceptado que en caso de muerte cerebral se donen sus órganos, sin embargo no hay un pronunciamiento público al respecto.

Al no haber mucho por hacer, la familia se fue a descansar no si antes agradecer a todas las personas que han estado apoyando con recursos, como son dependencias estatales y municipales.

Una de las parientes del niño afirmó que incluso el alcalde Isidro López está al tanto de su evolución.

EL DÍA DEL ATAQUE
El pasado 1 de diciembre el menor jugaba con su bicicleta en el exterior de su domicilio, ubicado en Santa Magdalena, en la colonia Las Margaritas cuando fue atacado por la mascota de una vecina

Con relación a la dueña del perro que atacó al menor, no se ha definido su situación, aunque se ha comprometido a hacerse cargo de los gastos.

APROVECHAN DESGRACIA
> La familia se enteró que algún listo ha querido sacar dinero de este episodio triste y creó una cuenta falsa en la red social Facebook donde piden dinero en su nombre. Ellos no han solicitado ayuda por ese medio.