Con castillo tipo Disney, casa de rehabilitación de Cristo Vive en Saltillo busca atraer a niños

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Con castillo tipo Disney, casa de rehabilitación de Cristo Vive en Saltillo busca atraer a niños

Diversión. El enorme castillo construido en terrenos de la organización Cristo Vive, recibe cada domingo a mil 500 niños y bebés con el firme propósito de alejarlos de las violencia. Fotos: Vanguardia/Omar Saucedo
Ya van 30 mil rehabilitados, asegura la organización, que niega ser un negocio

La organización religiosa Cristo Vive ahora cuenta con 3.5 hectáreas de terreno, 900 personas actualmente activas y hasta un castillo infantil para que los niños se acerquen a Dios de manera divertida. El dirigente Carlos Pacheco niega que se trate de un negocio. 

El gran edificio en 2001 era una casa de adobe. En menos de 20 años, la estructura de la asociación religiosa que ayuda a la rehabilitación de personas adictas ha crecido de manera impresionante, pues ahora cuenta con 3.5 hectáreas de terreno, un edificio de 5 pisos exclusivo para 200 mujeres mamás y un castillo infantil que cada domingo recibe a mil 500 niños y bebés, para “conectarlos” con Dios.

La infraestructura cuenta con un módulo de consejería, una imprenta, un taller carpintería, frutería, taller de soldadura, taller mecánico, taller de plomería, dormitorio de hombres y una cocina que prepara aproximadamente mil platillos diarios y en donde se cocinan los burritos, que tienen un precio de 40 pesos al público. 

Impresionante. Hace 20 años estas instalaciones no eran más que una casa de adobe.

Cercano al edificio principal se prepara la construcción de un nuevo auditorio que estará listo en dos años y que abarcará 2 hectáreas de terreno y 15 millones de inversión. 

La asociación que nació en Saltillo ahora tienen 30 casas de rescate en México, una en Colombia y está en proceso una más en el estado de Texas.

Aquí, dicen sus dirigentes, también “curan” el homosexualismo.

Según Carlos Pacheco, dirigente de la organización en Saltillo “Cristo Vive”, ha logrado rehabilitar a cerca de 30 mil personas.

Al preguntarle sobre las publicaciones en Facebook en donde Eduardo Pacheco, primo del dirigente declara que es un buen negocio “arrancarle las almas a Sátanas y entregarlas a Cristo”, Carlos contestó:
“Eso lo declaró un primo mío, que no les extrañe. Está en las escrituras ‘En los negocios de mi padre es necesario estar’”, citó el pastor. 

Planeador. Carlos Pacheco, dirigente de “Cristo Vive”.

“Si yo estuviera cobrando sí sería un negocio; no cobramos nada, no le cobramos ni al sistema municipal ni al estatal por el trabajo de rehabilitación. No cobramos ni un centavo a nadie. 

Cristo Vive es suficiente para trabajar; pueden ir a mi casa y se darán cuenta del lugar en el que vivo. El proyecto de ‘Cristo Vive’ lo quieren copiar en Europa y es orgullosamente saltillense; ahora tenemos 32 casas de rescate”, responde orgulloso.

Al preguntarle si el castillo infantil era una especie de estrategia de marketing para atraer a lo más pequeños, el pastor señaló que él prefiere tener este lugar lleno de niños y enseñarles lo que se puede alcanzar con el poder de la fe en Dios, y vivir como príncipes.   

Evangelización. Los niños (más de mil que se congregan cada domingo) acuden a escuchar la Palabra de Dios.

“Yo prefiero a ver niños en el castillo rehabilitándose de violencia y prevenirlos de adicciones. Este castillo es para renovar la mentalidad de los niños, si tendríamos el objetivo de impresionar la mente y comercializar, lo pondría en la zona norte y no aquí en este sector de Saltillo”, dice. 

Y agrega: “El castillo tiene un propósito inicial: enseñar a los niños que con el poder de Dios se les puede tratar como príncipes; les cambiamos la mentalidad de derrota, de suicidio, de bullying y además los alejamos de las drogas”, asegura.
#rehabilitación

Cristo en números

Terreno de 3.5 hectáreas.
Edificio de 5 pisos.
Castillo infantil.
Módulo de consejería.
Imprenta.
Taller carpintería.
Frutería.
Taller de soldadura.
Taller mecánico.
Taller de plomería.
Dormitorio para hombres.
30 casas de rescate en México y una en Colombia.