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Compran terrenos de panteón por Semefos saturados en Guerrero
Ante los problemas de ejecuciones que se han presentado, producto del enfrentamiento entre los grupos de la delincuencia organizada, que pelean el territorio en Guerrero y que en el estado están tres de los municipios más violentos del país, los tres Semefos estatales se saturaron y se tuvo que buscar otras opciones para poder tener los cuerpos de las personas que no fueron reclamas por sus familiares.
En febrero del 2018, los Semefos de Acapulco, Chilpancingo e Iguala tenían 750 cuerpos en sus cámaras frigoríficas sin reclamar, cuando su capacidad total era solo para 270 cuerpos en la suma de las tres ciudades.
Actualmente existe el proyecto de aumentar más Semefos a las ciudades de Zihuatanejo, Marquelia, Tlapa y Ciudad Altamirano.
Asimismo, existen ciudades donde algunas funerarias se habilitan para realizar las necropsias de ley y evitar los traslados de los cuerpos en largas distancias.
Trabajadores del Semefo aseguraron que los nuevos protocolos que se han dispuestos para la identificación de los cuerpos son más laboriosos y hace falta personal, por ejemplo, cuando llega una persona a buscar un familiar, se le aplica un cuestionario que lleva 4 horas, lo que es equivalente a medio turno de trabajo.
Ante este problema, se decidió comprar una parte de un cementerio particular en Chilpancingo y crear el Cementerio Forense, una vez que se tiene un expediente completo del cuerpo, que incluye una muestra de ADN y toda la información, ropa y lugar donde fue encontrado, se traslada a una bóveda y se deposita el cuerpo.
En caso de que alguien llegue buscando a una persona desaparecida, en base a la información que proporciona, se le muestra el expediente, se toman muestras de ADN y se coteja con los cuerpos que se tienen.
Si se identifica uno de los cuerpos, es sacado de la bóveda y se entrega a los familiares.
Gracias a esta medida se ha logrado controlar la saturación de los tres Semefos de Guerrero.