CDMX.- Comienza 2021 y un número importante de mexicanos enfrentará una cuesta de enero más complicada ante la reducción de ingresos y el desempleo ocasionados por la pandemia de COVID-19. Si bien los inicios de año siempre son complicados por los fuertes gastos que representan las fiestas decembrinas, éste en particular está marcado por una fuerte crisis económica, por lo que la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio (Concanaco) la ha calificado como la peor cuesta de enero en muchos años, ante lo cual debes de prevenirte para evitar desequilibrios en tus finanzas personales.

Entre los factores que debes considerar está el aumento que tendrán algunos productos por ajuste de impuestos. Apenas la semana pasada, el presidente Andrés Manuel López Obrador informó que la gasolina, los refrescos y cigarros tendrán un alza de precio a partir de 2021, además de que la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec) informó sobre un incremento de 8% en productos de la canasta básica al cierre de 2020.

Para hacer frente de mejor manera a la cuesta de enero, existen algunas recomendaciones que puedes aplicar, tomando en cuenta que, en algunos casos, el exceso de gastos se prolonga durante el primer trimestre.

PAGA TUS DEUDAS

En la medida de tus posibilidades, trata de liquidar tus deudas, salda tus tarjetas de crédito o adelanta pagos. Ante la situación actual, es muy importante tener flujo de efectivo para los gastos cotidianos y ahorro.

PREVÉ LOS TIEMPOS DIFÍCILES

En un escenario como el provocado por la contingencia sanitaria, se recomienda tener un fondo de emergencia de al menos tres meses de salario. Dichos recursos te ayudarán a enfrentar situaciones difíciles en los próximos meses.

NEGOCÍA CON TU BANCO

Si ya experimentas problemas de ingresos y tienes algunos préstamos pendientes, acércate con tu institución financiera y explica tu situación. Es muy probable que obtengas nuevas condiciones para el pago de tu deuda. Además, es importante tomar en cuenta que debes mantener un buen historial de crédito.

Ante la incertidumbre que prevalece sobre cuándo mejorarán las condiciones económicas y qué pasará con la aplicación de las vacunas y el efecto sobre la pandemia, es muy importante reducir gastos innecesarios.