Ante la proyección de la administración estatal de solicitar créditos emergentes por lo adverso del Presupuesto de Egresos de la Federación 2020, la Ley de Disciplina Financiera sí permite a la entidad solicitar préstamos a corto plazo, e incluso lo podría hacer sin la aprobación del Congreso de Coahuila.

También, hasta agosto de 2019, el Sistema de Alertas de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, mantenía a Coahuila bajo Observación, con lo cual la Ley de Disciplina Financiera también le permite contratar deuda a largo plazo, pero sólo hasta por el 5 por ciento de sus ingresos de libre disposición.

Los ingresos de libre disposición para Coahuila proyectados para el 2019 superan los 23 mil 500 millones de pesos, con lo cual la entidad podría solicitar más créditos a largo plazo hasta por mil 175 millones de pesos, pero estos sí, con la anuencia del Congreso del Estado.

El artículo 30 de la Ley de Disciplina Financiera permite a las entidades y los municipios contratar deuda a corto plazo, sin la autorización de las legislaturas locales; esos créditos deben ser quirografarios, es decir, que no tengan alguna garantía, y deberán cubrirse en un plazo de hasta un año.

Al 31 de octubre de 2019 la entidad reportó una deuda a largo plazo con bancos de 36 mil 668 millones 997 mil pesos.

Además al 30 de septiembre de 2019, en el Tercer Avance de Gestión Financiera se reportó una saldo de deuda a corto plazo (con pago menor a un año) de 275 millones 322 mil 914 pesos.

“Debemos mantener el flujo para sacar los compromisos. Nos vamos a ver obligados, incluso las prestaciones que por Ley reciben los trabajadores, a solicitar créditos emergentes para salir adelante y cubrir lo que el flujo no da en el transcurso de épocas del año donde se pagan aguinaldos y distintas prestaciones”, declaró el viernes pasado el gobernador del Estado, Miguel Riquelme al hablar sobre los recortes federales.