(Segunda y última parte)

Saltillo, Coahuila. Ayer, en la primera parte de la entrevista a VANGUARDIA, el gobernador Rubén Moreira, abordó temas como el próximo gobernador de Coahuila, que podría ser mujer, de cualquier parte del País, entre otras cosas, pero con un objetivo primordial: garantizar la seguridad del estado.

También aseguró que Coahuila requiere de alguien que priorice el crecimiento económico y tenga capacidad de diálogo; hoy habla de la desaparición de la Prodemi, y la eliminación de “coyotes” intermediarios.

Aborda temas personales como las amenazas que sufrió y también el cáncer qué padeció, también remarca los empleados creados en lo que va de su sexenio y como quiere dejar a Coahuila antes de terminar su administración.  

–¿Cómo ha impactado en la reducción de la corrupción la reforma hecha al inicio de su administración en la Ley de Adquisiciones y la concentración de ejecución de obra en la Secretaría de Infraestructura?–

“Las políticas públicas de un estado tienen que irse complementando unas con otras, no pueden ser nada más para buscar efectos en un segmento. Yo considero que una economía como la de nuestro estado es muy competitiva y Coahuila es un estado potente, por eso no debe intervenir mucho en el mercado, y mucho menos distorsionarlo. 

“Debe evitar desviaciones contra un segmento de la población, pero tiene que apostarle a que el estado crezca. Acciones como esta de la Ley de Adquisiciones no sólo tenían el objetivo de transparentar y hacer más baratos los productos, porque en aquel tiempo se estaban dando sobreprecios hasta del 15 por ciento a lo que comercializábamos en el estado. 

“Suena muy popular nomás comprar productos de Coahuila. Pero ¿si son los más caros del País? A la larga se produce una atrofia porque deja de haber competencia, incluso dejas de producir tu, mejor compras y vendes a sobre precio. Hay cosas que estamos impulsando como haber hecho esa nueva Ley de Adquisiciones donde se quitan sobre precios, que además eran hasta inconstitucionales, no sólo tiene efectos de bajar costos, sino también hacernos más competitivos y ponernos al tú por tú. Además somos mejores los coahuilenses. 

“Nosotros creemos que la Prodemi (Promotora para el Desarrollo Minero) tiene que desaparecer ya. Cumplió un ciclo, lo dijo hace unos días un exgobernador. Hoy tenemos enfrente una situación que es bien clara: para el 2024 México tiene que empezar a disminuir energías provenientes de carbón. Para alargar el tiempo de uso de nuestro combustible, tendrá que hacerse el carbón más barato. Pero si nuestro carbón es el más caro, será el primero que van a desechar.

“Eso no me toca a mí, es más, ni siquiera el siguiente sexenio, pero desde ahorita tenemos que sentar las bases para hacer lo que nos corresponde. Con licitaciones inversas queremos nosotros incluso golpear prácticas en las cuales haya intermediarios para que se tengan que bajar los precios y nuestro carbón sea comprado y la región Carbonífera prolongue esa actividad económica en el tiempo, la cual algún día va a terminar. En 80 años, si no arreglamos el problema del cambio climático, algunas áreas del mundo van a ser inundadas, algunas de México”.

–¿Habrá otro mecanismos para enseñar a los pequeños productores de carbón a licitar ante CFE?–

“La Prodemi hacía la función de darle la vuelta a las licitaciones internacionales. La CFE está dando capacitación. Es gradual, viene una primera etapa que es en estos días donde se licita una pequeña parte. Nosotros aspiramos a que todo el carbón que se consuma (en los plantas generadoras de energía en el Norte de Coahuila) sea coahuilense y que no vuelvan a salir esos “coyotes” como una Prodemi de Sonora que de una manera muy oscura se manejó para llevarse el dinero de aquí y que evidentemente “coyoteaba”, porque si allá (en Sonora) no producían carbón y era mismo carbón de Coahuila, alguien se estaba llevando el sobre precio, alguien que no era el gobierno de Sonora, por lo que sé.

“Que todo el carbón se licite y la cantidad de productores que hay, que son gente muy inteligente, van a entrar a licitaciones, es gradual, es este año y el otro”.

–¿Cómo se va liquidar la Prodemi, que no tiene una buena reputación?–

“Tiene una reputación no muy buena, pero hoy hay mucha gente que quiere que permanezca. Nosotros no estamos deshaciendo por la mala reputación. Es una acción de política pública responsable a partir de lo que nosotros creemos, que la competencia es lo que nos puede salvar en este momento, que si el carbón de Coahuila es caro en este momento, lo van a dejar de consumir. ¿Cuándo? En ocho años”.

–¿Qué vocación se está previendo para la región Carbonífera?–

“Ahí tenemos carbón y hay que ser competitivos. En teoría una licitación inversa (como la que aplicará CFE para la compra de carbón) destruye a los intermediarios, porque todos se van a la baja. Estar en contacto con la CFE para que el productor tenga yacimientos de carbón. La única manera que tiene de sobrevivir la economía del carbón es que sea más barato, y va a ser más barato cuando se quiten los intermediarios. No es muy popular lo que hago, pero un gobierno popular en muchas ocasiones termina no siendo un buen gobierno. 

“¿Qué va a pasar hacia el futuro en el estado?

Somos un estado poderoso: aquí se va a producir energía eólica, seguramente también energía solar. Las plantas eólicas que se construyen en Ramos Arizpe y General Cepeda son capaces de darle energía a toda la ciudad de Torreón. Esas 100 torres (que se van a instalar) son capaces de iluminar todo Torreón o todo Saltillo, el equivalente a ese tipo de ciudades.

“¿Cuál es nuestra fortaleza?

La manufactura. Van a seguir llegando plantas a Coahuila. Hay que cerrar ciclos, por ejemplo que no existan sólo capitales norteamericanos, que haya proveeduría local, que haya diversificación. Ahí hay preocupaciones muy específicas como el tema del inglés, aumentar la escolaridad. Estamos en muy buen tiempo para generar las condiciones de desarrollo de la tercera década del siglo. Aspiro a que las ocho universidades tecnológicas, siete en construcción y una que falta, le sirvan al estado, que incidan en el crecimiento en las próximas dos décadas”.

–¿Se está previendo el impacto social y de infraestructura por la generación de empleo y crecimiento que hay en la entidad?–

“Parto de un hecho: Coahuila tenía dos rezagos, uno en empleo calculado en 100 mil empleos formales. Podemos crecer 100 mil empleos y no pasará nada malo, sólo cosas buenas, esa es la perspectiva.

“Habrá efecto de incremento en los salarios y aumento de la edad en que la gente será contratada, eso también es bueno. En el buen sentido de la palabra, es importante saturar la región Sureste (con empleo) para que se corra la línea del empleo hacia el centro del estado. Es importante que Piedras Negras también llene sus necesidades de empleo para que se corra al centro del estado, si no, no aspiramos a llevarle empleo a una persona en Múzquiz o Cuatrociénegas”.

–¿Se ha entendido por parte la ciudadanía cómo funciona esto de correr la línea de empleo hacia el Centro del estado?–

“Al final del día quien decide donde establecerse es el empresario. ¿Qué factor hay para que alguien decida dónde establecerse? La competitividad, que está ligada a cuánto cuesta producir y cuánto lo puedo vender. Siempre se busca estar más cerca del mercado porque es más barato o insumos más baratos. ¿Cuál es nuestra teoría? Generar competitividad. Por eso la carretera Torreón-Cuatrociénegas y por eso promocionar Torreón como un objetivo de negocios. No pueden jugar en contra la distancia y la disposición de recursos humanos, por eso si se saturan los mercados habrá un corrimiento hacia el centro del estado”.

–¿Lo que está sucediendo en Kia Motors y el Gobierno de Nuevo León tuvo algún impacto entre las empresas que vendrán a Coahuila, como proveedoras?–

“El mejor lugar para establecer una armadora que va a exportar es Coahuila, por muchas razones. Se tomó la decisión que la Kia estuviera un estado vecino. Nosotros competimos y creo que Coahuila hubiera sido el mejor lugar, porque acá no se tiene que construir infraestructura. Tenemos lugares en donde hay toda la infraestructura que están construyendo. No hubiéramos invertido un peso en infraestructura porque tenemos muchas universidades, muchos jóvenes y tenemos experiencia de 40 años haciendo vehículos y 60 años haciendo vehículos de combustión, aquí se empezaron a hacer las motocicletas. 

“El mejor lugar hacia el futuro para invertir en armadoras que vayan a exportar es Coahuila. La inversión viene determinada por muchas razones. En nuestra administración llegó la Fiat, Freightliner está aumentado producción. General Motors y Chrysler siguen aumentado producción aquí. Somos el mayor estado autopartero del País, porque generamos unas condiciones de competitividad muy buenas: cercanía con los Estados Unidos.

“Yo no digo que ofrecí, porque está en la confidencialidad pero sí te puedo decir que ofrecí un lugar, que llegó a la final, en el cual no había que construir infraestructura y que estaba en la Comarca Lagunera”.

–¿Los empresarios piden más a parte del subsidio de impuestos como el ISN para instalarse en Coahuila?–

“Sí, y en todo el mundo se hace. Es algo que reditúa. Si aquí se establece una empresa grande como la coreana que se está instalando en Torreón, son alrededor  de 5 mil familias que van a tener un empleo. Son aportaciones al IMSS, al Infonavit, gente va a tener para pagar su predial y para el comercio gente que va a generar consumo. Sí reditúa. ¿Qué sería Coahuila sin la General Motors y la Chrysler, que trajo Flores Tapia. De ahí se desencadenaron muchas cosas. “Seguramente el licenciado (José) De las Fuentes, el licenciado (Eliseo) Mendoza honraron convenios que venían de ahí, como a mí me tocó honrar convenios que venían de antes y a mis sucesores les tocará honrar convenios que yo he firmado.

“El estímulo también está relacionado con el interés legítimo de que en alguna parte se establezca una empresa. Para mí era muy importante que la Yura llegara a Torreón y romper una seca de 20 años que no llegaba una gran empresa a Torreón. Para mí era importante. 
Tienes que ponerle más estímulos. Tenemos zonas donde no cobramos ISN, porque son zonas difíciles, como Viesca, Sierra Mojada…ahí nos interesa mucho que haya empleo.

–¿En estos municipios las empresas no van a tener el cobro del ISN?–

“No. pero además en zonas como Ramos Arizpe, Arteaga y Saltillo también hay estímulos. Tenemos miles de jóvenes estudiando en las preparatorias, no nos podemos parar. Si te paras dejas sin empleo a alguien”.

–¿Al inicio de su mandato cuál fue la región que vio más complicada y por qué?–

“Yo aspiro a dejar de ser un estado de regiones para ser la región más competitiva del País, es una aspiración que yo espero se cumpla y que todos los coahuilenses pensemos en ella. No es lo mismo competir en partes que competir todos juntos, además no somos rivales las regiones. Este estado tiene frontera. 

“Tenemos un gran territorio que nos permite surtirnos entre nosotros mismos muchas cosas. Es una gran ventaja, complementarnos. Me permite a mí como gobernador complementar acciones, como decir que puedo otorgar más estímulos en una parte del estado. Si actuamos como regiones unas regiones van a luchar contra otras y algunas van a salir en desventaja. Seamos la región más competitiva. 

“En seguridad todo el estado estaba incendiado. En Piedras Negras era un campo de batalla. Acuña era una ciudad sin orden. Torreón era un campo de enfrentamiento entre dos grupo delincuenciales con una autoridad municipal que empezaba a luchar contra la inseguridad que le habían heredado a él (Eduardo Olmos) de aquella administración de José Ángel Pérez. Era una policía municipal que ninguno pasó las pruebas de control de confianza y que se enfrentaba a la policía federal.

“En Saltillo ustedes sacaron muchísimas fotos. Hay historias que nunca se dieron a conocer, primero porque en el día a día eran tantas que se sepultaban unas con otras. Aquí en la Plaza (de Armas), partes de cuerpos humanos nos dejaron aquí, enfrente de Palacio. Nunca se supo porque eran tantas noticias que se iban tapando unas con otras. No había historia, todo era novedad”.

–¿Cree de verdad que algún día regrese el crimen organizado?–

“Yo creo de verdad en la amenaza. Sería muy ingenuo no decirlo. Vamos muy bien. Espero agotar hasta el último minuto de mi gobierno en temas de seguridad. La última acción que voy a hacer yo, seguramente será en el tema de seguridad y creo que cuando menos los dos sexenios siguientes tendrán que trabajar muchísimo en seguridad, en acciones contundentes, en análisis. “Originalmente le dedicaba el 90 por ciento de mi día a la seguridad, desde protección personal mía, tuvimos una secuela grande de amenazas, hasta resolver el día a día. Ahora es un 50 por ciento. Lo primero de mi tiempo que hago en la mañana es revisar la incidencia delictiva del día anterior, y durante el día debo estar recibiendo cuatro reportes de seguridad de lo que está pasando”.

–¿Ya no lo han amenazado?–

“No. Últimamente no. Ya están en cárcel yo creo algunos, y otros se murieron. Yo no estudie para policía pero tengo una maestría de cuatro años aquí. Esto le pasa a todos los gobernadores que se meten en esto de la seguridad: llegas a distinguir un homicidio que se sale de la lógica, llegas a percibir el influjo que está teniendo el alcohol en los homicidios. Muchos homicidios de mujeres por alcohol. Llega alcoholizado el hombre y la golpea, eventualmente la mata, pero te das cuenta.

“Hace poco tuvimos un homicidio ejecución de dos personas en la región Centro. Nos alarmó inmediatamente. Le seguimos la huella y fuimos a dar hasta Zacatecas y Nuevo León y capturamos a parte de los responsables. Eran fuerzas de seguridad, malos elementos que están en la cárcel. Seguramente ahí van a estar el resto de la cárcel. Pero empiezas a distinguir lo que pasó.

“Algunas investigaciones que traemos en el Norte, relacionadas con Notarios Públicos se desencadenaron por resultados de cateos que nos parecieron muy raros. Vas y sigues un poco la huella. Todos los días hay que estar en eso”.

–¿Habrá consignaciones pronto en el caso de desaparecidos. Se refería al caso de Allende?–

“No. En otros casos. La zona Norte del estado tuvo mucha violencia en esos años. Las desapariciones en Coahuila comenzaron en el año 2004, y las primera que empezaron fueron en la frontera, ahí empezó un grupo delictivo con una forma de operar totalmente distinta, no conocida en Coahuila, en base al terror. 

Empezaron a haber desapariciones, en otros lugares del país esas disputas se arreglaban de otra manera, o desplazando a los grupos, llegando a acuerdos, subsumiendo unos a otros, sacándolos del mercado. Este grupo delictivo que llega es de violencia y empiezan las desapariciones en Coahuila, que tienen su climax en el 2010 y 2011. La cúspide ese climax es la venganza por el rompimiento de acuerdos generados por la protección que establecen autoridades extranjeras a testigos. Ahí empezó una serie de venganzas que desembocaron en una cúspide de violencia. Pero en todo ese tiempo hubo muchas desapariciones que tenemos que solucionar. Castigar a los responsables.

–¿Se van cerrando los ciclos jurídicos, por ejemplo en el caso de Allende?–

“El de Allende se cerró. Hablamos con las familias, creo que quedaron satisfechos, obviamente no contentos porque fue una tragedia. En el caso del Norte del estado traemos averiguaciones que pronto van a tener consignaciones también”.

–¿En estos cuatro años, cuál ha sido la obra, acción o programa que a usted más le haya satisfecho?–

“Hay muchas cosas buenas. 117 mil empleos en cuatro años, ser primer lugar de formalidad en el país, cuando empezamos en cuarto lugar. No hay un estado que haya avanzado ocho puntos en formalidad en la historia de este país. Ver que el municipio de Piedras Negras tiene un sistema pensionario y que 14 más también lo van a tener. 

“Imagínate. O arreglar el sistema pensionario del Tribunal (Superior de Justicia) son cosas de mucha satisfacción. Ves 8 universidades. Nomás díganme cuándo se construyeron tantas. O ver un cuartel para el Ejército. O ver una pista alterna en el Aeropuerto de Saltillo, es una cosa muy padre. Pero creo que los momentos en que uno dice: cambiamos las cosas es por ejemplo en temas de derechos humanos. Ya no discriminamos por la preferencia sexual. 

“Somos una sociedad distinta. Cuando decimos aquí el matrimonio se acabó o continúa por amor y no porque un juez diga que las personas son cosas. En los temas de seguridad social, las jubilaciones. En algunos países las obras no están a discusión. Los gobernadores no andan inaugurando puentes, es más todos los puentes son iguales. En Singapur hay una maqueta donde dice que se va a construir en los próximos 50 años, por eso no eres dueño de la tierra por más de 50 años, porque a lo mejor van a construir un Hospital arriba de tu casa. Nadie es dueño de nada por más de 50 años. Los derechos es lo que hay que dar, aunque claro que también hacemos obra”.

–¿Qué le diría usted a las personas por estas leyes, que como lo ha dicho, son impopulares en las que al final de cuentas se ven resultados?–

“Que no las sacamos de la chistera. Cuando vimos a lo que nos estábamos enfrentando, en diciembre de 2011, reflexionamos mucho con el equipo y trajimos a cuenta experiencias de otras partes del mundo. Una, si tu tienes una gran cantidad de mujeres jóvenes que no están haciendo nada, los tienes en riesgo, no quiere decir que se vayan a transformar en delincuentes, quiere decir que sobre ellos van a ir a ver cuántos agarran.

“Dijimos empleo: que la gente se levante y se vaya a trabajar y por la tarde a descansar. Escuelas, que estén seis o siete horas en la prepa. De donde saca el dinero el narco: de vender droga. Pero también los saca del alcohol, del juego y de la piratería, entonces le pegamos a eso. Otra parte fue que para fuera todos los policías malos. Hubo municipios que le pagaban el abogado a los policías despedidos. Eso se llama complicidad, a lo mejor no en términos de la Ley. No los puedes castigar por eso, pero el gobierno de José Ángel Pérez le pagaba los abogados. Aquí hubo gobiernos recientemente, y como tengo una buena relación y creo que ya superaron ese problema, que quisieron volver a contratar policías. En las campañas le dijeron, yo te voy a volver a recontratar. Si oyeran lo que dice un policía no certificado, se espantan.

Yo escuché uno a quien le preguntaron: cuáles tu misión. Dice, yo no soy Zeta, yo lo que hago es que me dieron un radio, y yo les aviso a qué horas llega la Marina, el Ejército, o el Gobernador. Pero él decía que no era (delincuente) y cambio le daban unos pesos. Esos policías estaban dentro. O bien encontrabas a una persona ejecutada y resulta que traías las esposas de unos policías. No faltaron voces que empezaron a decir yo te defiendo, es una injusticia, esto no va a servir para nada.

“Recuerdo que aquí había bares que decían no voten por el PRI porque nos pusieron el horario del alcohol”.

–¿Su opinión del debate sobre la legalización de la mariguana?–

“Yo soy a favor de muchos derechos y muchas libertades. El tema de la mariguana, no está a mi juicio, en que alguien pueda consumirla. En este país no se castiga por eso, desde nunca. El tema está en el descontrol que se ocasiona si se empieza a producir en todas partes. Algo que el Presidente dijo de una forma muy coloquial, pero que al final en eso se materializa: ¿se puede fumar mariguana enfrente de un niño? No podemos controlar la adicción a los carbohidratos, cómo vamos a enfrentar eso. No hay normas para conducir en estado de mariguana, te paras en el alcoholímetro, no en el mariguanómetro”.