Las agresiones contra sacerdotes en Coahuila ubican a la entidad como el sexto estado más riesgoso para ejercer el sacerdocio dentro del ranking nacional, donde por octavo año consecutivo se ubica a México como el país más peligroso en América Latina para los pastores de la Iglesia.

La sede episcopal de la Iglesia Católica en Saltillo confirmó la existencia de una denuncia formal por la desaparición del vicario Joaquín Hernández Sifuentes y descartó su localización en el atentado número 26 contra la Iglesia en lo que va del sexenio.

El vicario de la parroquia Sagrado Corazón de Jesús fue visto por última vez 15 días después de que el Centro Católico Multimedial ubicara a México como el país más peligroso de América Latina para padres católicos.

El departamento de comunicación de la Diócesis de Saltillo, rechazó por completo todo tipo de rumores acerca de Hernández Sifuentes, asegurando que cualquier avance en la investigación sería dado a conocer a través de un comunicado oficial con firma del obispo Raúl Vera, tal y como sucedió el pasado 7 de enero cuando se anunció su desaparición.

La sede desmintió que el religioso, miembro de una parroquia en La Aurora, Coahuila haya sido ubicado en Monclova, tal como lo habría dado a conocer un miembro de la parroquia Divina Providencia, de la misma ciudad. Encargados del departamento de comunicación de la Diócesis aseguraron que todos sus miembros se encuentran consternados y evitarían manejar cualquier tipo de información falsa.

La PGJE continúa trabajando en la investigación manteniendo al tanto a la Diócesis de Saltillo de cualquier avance, sin que hasta el momento se tengan indicios del paradero del vicario.

El informe anual del Centro Católico Multimedial realizó un conteo de 25 atentados, hasta el 20 de diciembre de 2016, contra miembros de la Iglesia Católica durante la administración de Enrique Peña Nieto, reportando 15 de estos hechos contra sacerdotes, un seminarista, 5 laicos, 2 secuestros frustrados y 2 presbíteros que aún se reportan como desaparecidos.

El informe titulado “Tragedia y crisol del sacerdocio en México: 10 años de persecución”, firmado por P. Sergio Omar Sotelo Aguilar SSP, ubicó a los estado de Guerrero y Ciudad de México como las entidades más peligrosas para la práctica del sacerdocio con un 15 por ciento de incidentes cada uno, seguido en segundo lugar por Veracruz y Michoacán, con un 9 por ciento; Chihuahua se encontraría en el tercer lugar, seguido por Baja California, Tamaulipas y Puebla con un 6 por ciento, respectivamente; Oaxaca, Jalisco y Estado de México cuentan con el 4 por ciento.

Coahuila se habría despegado de los últimos lugares con la desaparición de Hernández Sifuentes, alcanzando el 3 por ciento, una vez que Hidalgo, Aguascalientes, Guanajuato, Sinaloa, Durango y Colima no han presentado atentados contra sus miembros y continúan contando con un 2 por ciento de incidencias en total. 

Ataques
México está considerado como el país más peligroso de América Latina, para ejercer el sacerdocio. 
> Guerrero y la CDMX son las entidades más riesgosas para miembros de la Iglesia. 
> Les siguen Baja California y Michoacán.
> Chihuahua se ubica en tercer sitio. 
> Baja California, Tamaulipas y Puebla ocupan el cuarto sitio. 
> Oaxaca, Jalisco y Estado de México, quinto lugar.
> Hidalgo, Aguascalientes, Guanajuato, Sinaloa, Durango y Coahuila, en sexto sitio.