Hillary Clinton se convierte en la primera mujer candidata a la Presidencia de EU
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Hillary Clinton se convierte en la primera mujer candidata a la Presidencia de EU
FILADELFIA.- El Partido Demócrata coronó ayer a Clinton como candidata a las elecciones presidenciales del 8 de noviembre. Es la primera vez que un gran partido de EU nomina a una mujer para el cargo de Comandante en Jefe.
La nominación de Clinton llega tras días de tensión con los partidarios de su rival en las elecciones primarias, el senador Bernie Sanders. El argumento más persuasivo para la unidad es el peligro para el País de una victoria del republicano Donald Trump.
A las 18:39 horas, Clinton alcanzó la mayoría de delegados para ser la candidata que se enfrentará a Trump el 8 de noviembre.
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— Hillary Clinton (@HillaryClinton) 26 de julio de 2016
La delegación de cada Estado repartió sus votos entre Clinton y Sanders, en función de los resultados de estas Entidades. Clinton tenía 2,814 delegados de un total de 4.763, según el último recuento. Sanders, 1,893. La mayoría se sitúa en los 2,383.
Después de anunciar Vermont sus votos, Sanders, que es senador por este Estado, tomó la palabra y pidió la nominación de Hillary Clinton como candidata por aclamación. El pabellón estalló en la mayor ovación de los primeros dos días de la Convención.
PARTIDARIOS DE SANDERS IMPROVISARON PROTESTA
El gesto de Sanders sellaba simbólicamente la paz entre los jefes de las dos facciones enfrentadas del Partido Demócrata. Minutos después, un grupo de delegados y partidarios de Sanders, insatisfechos con un proceso que consideran amañado, abandonaron el pabellón e improvisaron una protesta en la sala de prensa adjunta al recinto.
Acababa así un proceso de primarias que dejó grietas en el partido, como se ha comprobado en Filadelfia. Cuando el jueves, la exsecretaria de Estado y exprimera dama, Clinton acepte la nominación en un discurso ante la Convención, comenzará oficialmente una de las campañas más duras en décadas, que enfrentará a la primera mujer con posibilidades de ser Presidenta con un político proclive a las expresiones misóginas y xenófobas como el magnate Trump.
La función de las convenciones de los grandes partidos en EU es dar por cerrado el periodo de primarias en los 50 Estados, que este año, duró más de 5 meses, y abrir la fase final de la campaña electoral.
Una buena convención pone fin a las divisiones lógicas de un proceso en el que compiten varios candidatos, y logra el cierre de filas ante las presidenciales de noviembre.
NOMINAN A TRUMP, PERO ACABAN MUY DIVIDIDOS
La semana pasada en Cleveland, los republicanos nominaron a Trump, pero salieron divididos. La prueba es que la primera rueda de prensa de Trump tras la convención estuvo dedicada a ajustar cuentas con el senador Ted Cruz, que fue su rival en las primarias y en Cleveland se negó a declararle el apoyo. En el Partido Republicano las heridas siguen abiertas.
Por contraste, la convención del Partido Demócrata en Filadelfia debía ser una fiesta de unidad y reconciliación. Todo se torció en las horas previas.
La filtración de miles de correos electrónicos del Comité Nacional Demócrata (DNC), el órgano rector del partido, confirmó las sospechas de los seguidores de Sanders: que los jefes del partido, renunciando a su deber de neutralidad, habían favorecido a Clinton en su pugna con Sanders. Es discutible que estas maquinaciones tuvieran un efecto notable: Clinton obtuvo más de 3 millones de votos más que Sanders.
Pero la revelación, publicada por WikiLeaks y, según las sospechas del equipo de Clinton, filtradas por el Gobierno ruso, abrió una crisis en el momento más inoportuno. Precipitó la dimisión de la jefa de DNC, Debbie Wasserman Schultz.
El respaldo de Sanders a Clinton fue inequívoco: “Cualquier observador objetivo concluirá que, basándonos en sus ideas y su liderazgo, Hillary Clinton debe ser la próxima presidenta de EU”.
El éxito de la convención se medirá en la capacidad de Clinton para llevar a las urnas a millones de sanderistas, muchos de los cuales están decepcionados con la campaña y la ven como una oligarca sospechosa de corrupción, una imagen extendida en EU.
LOS SONDEOS NO SON CONCLUYENTES
Pew Research Center indica que un 90% de partidarios de Sanders se inclinará por Clinton y no por Trump. Este porcentaje supera con creces el de los seguidores de Clinton que en 2008, estaban dispuestos a apoyar a su competidor, y vencedor en las primarias (Obama. Al final, los clintonistas se convirtieron al obamismo.)