Clint Eastwood: Sus inicios en la pantalla chica

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Clint Eastwood: Sus inicios en la pantalla chica

Hoy es un día especial para el actor hollywoodense Clint Eastwood al cumplirse 90 años de edad de su nacimiento acontecido el 31 de Mayo de 1930 en San Francisco, California.

El hecho de que siga activo en el quehacer cinematográfico, aunado a su así en su totalidad relevante filmografía, es otro de los motivos para compartir con él este festejo viendo alguna de sus películas, pero lo que pocos saben es que sus inicios se dieron en la pantalla chica de una forma similar a la del personaje de Leonardo DiCaprio en la película ganadora del Oscar “Había una vez en Hollywood”, de Quentin Tarantino, la cual, desde su título, es un homenaje a la Época de Oro del cine del género de vaqueros, mismo que tuvo su “segundo aire” en Europa, en específico el denominado “spaghetti western” del que Eastwood fue uno de sus principales representantes bajo la dirección del gran realizador Sergio Leone en clásicos como “Por un Puñado de Dólares” o “El Bueno, el Malo y el Feo”.

Sin embargo, para que Eastwood llegara a ese punto del estrellato que finalmente le abrió los ojos a Hollywood a uno de sus grandes talentos oriundos del mismo estado de California, al igual que ocurre al personaje de DiCaprio en la mencionada película, Rick Dalton, luego de varios años de participar en uno de los roles secundarios de la famosa serie de televisión del Viejo Oeste “Rawhide” (1959-1965) Eastwood su oportunidad protagónica cuando el estelar, Eric Fleming, dejó la serie en su última temporada, pero ya como Clint no veía mucho futuro estando prácticamente atado a ese trabajo y ninguno fuera de él, aceptó el ir a filmar a Europa una película de bajo presupuesto y equipo italiano que fue la mencionada “Por un puñado de dólares”, en 1964, y el resto fue historia.

Tan gratificante fue la experiencia de filmar esta serie de películas, y teniendo un maestro del cine de la estatura de Leone, que Clint Eastwood se sintió lo suficientemente apto para hacer su debut en la silla del director a principios de la década de los 70 con un memorable thriller como lo fue “Obsesión mortal” (“Play Misty for Me”), de 1971, con tan buenos resultados que de ahí en delante no le faltó trabajo ni delante ni detrás de las cámaras de los sets cinematográficos regresando a la experiencia de trabajar en la pantalla chica solo una ocasión a mediados de los años 80 para dirigir el primer episodio de la serie “Historias asombrosas”, en 1985, una producción de Steven Spielberg en la tradición de el clásico “Dimensión Desconocida” (“The Twilight Zone”), también iniciada a finales la década de los 50.

Para terminar, y aunque Clint Eastwood tomó literalmente la estafeta en el Séptimo Arte que le dejó frente a las cámaras un ícono del género como John Wayne y fomentó no solo en el género western la imagen consecuente de un hombre macho al que había que “guardarle sus respetos”, a mediados de los años 90 mostró sin vergüenza alguna que también tiene “su corazoncito” y precisamente por la insistencia de una productora iniciada con el mencionado Steven Spielberg, Kathleen Kennedy, aceptó no solo dirigir sino protagonizar la adaptación cinematográfica de la novela “Los Puentes de Madison”, que le dio una más que merecida nominación al Oscar a su coprotagonista Meryl Streep. ¡Feliz cumpleaños!