De acuerdo con cifras de la Secretaría de Educación Pública (SEP) 40% de los estudiantes que cursarán  sus estudios de nivel superior se concentran en solo diez carreras aproximadamente, que son las más comunes (derecho, medicina, odontología, administración, turismo, entre otras). 

Mucho se ha investigado acerca de las causas de este patrón que llevan los jóvenes, por lo que expertos en pedagogía y psicología han coincidido en que esto se debe, en primera instancia a la poca educación vocacional que se imparte de la gran variedad de carreras universitarias que existen no solo en el país, sino a nivel internacional.

Otro factor que también ha influido en su toma de decisión son las diferentes modas, tradiciones familiares o temor a estudiar algo que no sea lo suficientemente redituable para su desarrollo profesional.  

Por su parte, la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) determinó que en México algunas  de las áreas que casi no cuentan con profesionales (ciencias biológicas, ambientales, tecnológicas, entre otras) son los sectores que suponen un amplio potencial de oportunidades laborales, sobre  todo redituables. 

1- CIENCIAS AMBIENTALES
En los últimos años todo lo referido a la protección del medio ambiente ha cobrado gran relevancia; razón por la cual muchas instituciones mexicanas han creado licenciaturas e ingenierías especializadas en su estudio y preservación.

2- CIENCIA FORENSE
Los profesionales de esta carrera que combina los conocimientos médicos con el peritaje y la criminalística, son sumamente demandados en el ámbito legal. 

3-  GEOCIENCIAS Y GEOHISTORIA
Ambas carreras se dedican al estudio del territorio a partir de diferentes perspectivas. 
 
4- PLANEACIÓN TERRITORIAL Y ESTUDIOS SOCIOTERRITORIALES
Su objetivo es estudiar el crecimiento de las ciudades y sus problemas, así como todas las alternativas para resolver los mismos y mejorar la calidad de vida de la población.
 
 5- ENERGÍAS RENOVABLES
Esta carrera abarca la investigación, el diseño y la innovación en tecnologías que permitan aprovechar fuentes alternativas de energía que provoquen un menor impacto ambiental.