Gustavo Arballo, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, reconoció que le preocupa el próximo aumento al cemento, anunciado para que se dé el 1 de julio.

En entrevista para Aristegui en vivo, dijo que hay “malestar en todo el país por parte de constructores y el sector formal organizado, que necesariamente tiene que cargar con este incremento”.

“Lo que más nos preocupa es que no vemos las condiciones en este momento de un incremento de esta naturaleza y eso es lo que hemos venido manifestando”, expuso.

Refirió que el incremento que se anunció de un 15 por ciento, a inicios de 2017, estuvo “justificado por incremento de los energéticos”.

“Pero hoy a mediados del año, cuando los presupuestos están definidos, con un nuevo incremento en las obras en proceso difícilmente vemos la posibilidad de trasladarlo al consumidor”, apuntó.

“Uno de los últimos consumidores importantes se llama gobierno y también debe haber preocupación por estos incrementos”, anotó.

Ante el aumento del 12 por ciento, a partir del 1 de julio, “no estamos viendo el motivo por el cual debiera haber este nuevo incremento”, refirió.

Las “cementeras simplemente lo anunciaron… se generará esta semana una mesa de diálogo con la Cámara del cemento, con la Cámara empresarial de la vivienda y constructores que somos los primeros consumidores”, adelantó.

“También el tema de la vivienda tendría que incrementarse con la afectación al último consumidor o comprador, o a las empresas en caso de que tengan que absorberlo”, acotó.