Carta Magna tiene un mal diseño de las instituciones: especialistas

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Carta Magna tiene un mal diseño de las instituciones: especialistas

Cambio. Académicos exponen que la Constitución debe ser “un libro de la sociedad”. / Foto: CUARTOSCURO
El examen de la Constitución que cumple 100 años vigente y en continuo cambio, arroja desorden, defectos y errores

Por: Juan Arvizu

CDMX.- El examen de la Constitución que cumple 100 años vigente y en continuo cambio, arroja desorden, defectos y errores que la academia propone sean corregidos, sin que le haga caso la clase política, a pesar de que se dirigen advertencias de que el texto contiene un “mal diseño de las instituciones”, en particular, del régimen de gobierno. El tiempo que se pierde en este ajuste se paga con más problemas de gobernabilidad, señalan especialistas.

Diego Valadés, académico del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM, dice: “Tenemos un claro déficit de gobernabilidad que se traduce en corrupción, violencia, pobreza, inclusive en fragilidad frente a lo que nos está ocurriendo en la relación con Estados Unidos, y todo eso es resultado de que no hemos construido en la Constitución instituciones lo suficientemente sólidas”.

Alejandro Madrazo Lajous, profesor-investigador de la División de Estudios Jurídicos del Centro de Investigación y Docencia Económica, afirma: “Habría que revisar el régimen de gobierno para dar cabida a las necesidades de la pluralidad de hoy en día”, como es el hecho de que un partido político de un Presidente no alcanzan mayorías simples para gobernar.

Roberto Guerra, integrante del proyecto social Observatorio Parlamentario, señala que en las cámaras de Diputados y Senadores, proponer reformas constitucionales suele tomarse a la ligera, y las iniciativas que avanzan, ello obedece a que han sido pactadas por los liderazgos y se procesan sin discusión. Y si las organizaciones civiles intentan, por lo menos, ser escuchadas en comisiones se les obstruye presentar sus propuestas.

Valdés, quien ha sido ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y director del IIJ, coordinó junto con Héctor Fix-Fierro un estudio académico que reordenó y consolidó el texto de la Constitución vigente en el momento del ejercicio (julio de 2014), con el propósito de que “restaure sus cualidades formales y técnicas”.

“La necesidad de sistematizar la Constitución para hacerla más legible y de condensar el texto para darle también mayor accesibilidad al público en general, es una de las condiciones esenciales para que vuelva a ser lo que siempre debe ser: un libro de la sociedad”, dice Diego Valadés.