La vida de Cardi B no ha sido nada fácil, antes de ser una rapera, compositora y actriz estadounidense. La joven se crio en uno de los barrios más pobres de el Bronx, Cardi B formó parte de diversas pandillas callejeras, lo que conllevó a que tuviese una infancia y adolescencia sumamente turbulenta, incluso llegando a sufrir violencia de género de parte de uno de sus novios.

A los 19 años, consiguió trabajo como stripper y por ello se sometió a numerosas cirugías plásticas para aumentar sus senos y glúteos con el fin de obtener mayores propinas. Ahora, la flamante mamá es una estrella internacional, y aseguró ayer a través de redes sociales, que no está lista para separarse de su bebé recién nacida para irse de gira con Bruno Mars, por lo que renunció a ser su abridora.

La rapera tuvo a Kulture Kiari Cephus este mes, y planeaba comenzar la gira con Mars en Denver en septiembre, cuando su hija tendría unas seis semanas de nacida.

Pero el jueves en Instagram, Cardi B dijo que no se ha recuperado físicamente del parto y que los médicos señalaron que no era recomendable llevarse a la bebé de gira.

Cardi B dijo a sus fans que “desestimó todo el asunto de ser mami” y pidió que la comprendan al mismo tiempo que le agradeció a Mars por su apoyo. En Twitter, Bruno Mars dijo que Cardi B estaba haciendo lo correcto.