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Camino del emprendedor es como un sube y baja: Antonio Abarca Gómez
Bajo el lema de que los emprendedores son personas comunes y corrientes, Antonio Abarca, ganador del premio nacional del emprendedor en 2014 y co-fundador de la empresa Incorpora Tecnologías, platicó su experiencia de haber creado el producto thermodriver control programable, un dispositivo adaptable al boiler para tener un control total sobre gas.
Abarca Gómez dijo a los jóvenes durante el último día del congreso Progressus que “el camino del emprendedor es como un sube y baja”, pues no siempre las cosas que se propongan serán como lo habían planeado.
Aceptó que su proyecto –thermodriver– ya no es un caso de éxito porque intentó venderlo demasiado tarde, pero fue lo que lo impulsó a seguir adelante.
“El camino del emprendedurismo es como un sube y baja; un día te levantas con muchas ganas, pero al otro día te levantas con ganas de no hacer nada”, externó el sonorense, egresado del Instituto Tecnológico de Hermosillo.
Los múltiples premios por su proyecto y su experiencia al innovar, lo llevaron a incorporarse a trabajar en el Grupo Industrial Saltillo (GIS), donde desde hace siete meses trabaja en un proyecto del cual prefiere no dar detalles.
“Mi proyecto ya no es un caso de éxito. Lo fue porque me hizo ganar varios premios. Se me ocurrió empezarlo cuando estaba en tercer semestre de ingeniería mecatrónica en el Instituto Tecnológico de Nogales porque a mi vecina le explotó el boiler. Entonces comencé a buscar una solución al problema”, platicó.
Su proyecto para encontrar la solución al problema que frecuentemente ocurre con los boiler de gas, iba mucho más allá de lo que un estudiante de tercer semestre de la carrera se propone. Su ambición por cumplir su meta lo llevó a participar en el primer evento nacional de innovación tecnológica en León, Guanajuato, donde obtuvo el segundo lugar.
Aunque primero ingresó al Instituto Tecnológico de Nogales, de donde es originario, Abarca Gómez tuvo que cambiar su lugar de residencia y se incorporó al Tecnológico de Hermosillo.
Con su proyecto ganó el Premio Nacional de la Juventud en 2013 y el Premio Nacional del Emprendedor en 2014. “Después empieza a haber conflicto de intereses entre los institutos en los que estuve. Yo reflexioné que era la idea la que tenía que triunfar y decidí no dejarla morir. Se trataba de una aplicación al calentador que tenía electrónica, software Android y iOS. Consulté que había 15 millones de casas sin calentador, entonces pensé que eso significaba 15 millones de thermodrivers vendidos”, contó.
Cuando consiguió los recursos para invertir en el proyecto junto con 4 de sus compañeros, se dio cuenta que las cosas no serían como él había planeado. La mayoría de las 15 millones de viviendas están en los lugares más calientes y, por lo tanto, no necesitan boiler. Las que están en lugares fríos del país, no tienen este aparato porque sus recursos no se los permite.
Tardó en vender su proyecto a una empresa. Cuando lo intentó ya había llegado alguien más que había ofrecido un producto similar.
“La idea tan galardonada de thermodriver no funcionó, caí en depresión como por un año y medio. A pesar de eso, después pensé que el proyecto sigue con un poco de vida y que hay cosas que salvar de él”, reflexionó.
Durante ese tiempo estuvo en su zona de confort, que resulta ser un gran problema para todas las personas, pues hace que ellos mismos se limiten a hacer las cosas. Pero si te arriesgas y cruzas la línea, tu zona de confort se amplía.
Recomendó a los jóvenes ser creativos, intentar las cosas que se proponen, pero también les dijo que deben ser realistas. “No todo es tan bello como lo cuentan las películas. Los emprendedores somos personas comunes, no es fácil, pero si tienes la corazonada de que quieres hacerlo lo haces y ya”.