A finales de los años 90, el actor Brendan Fraser era una de las estrellas emergentes de Hollywood. Entre otras, el estadounidense protagonizó películas como “George de la Jungla” o la trilogía de “La Momia”. Proyectos que le situaron entre los rostros más conocidos del mundo del cine.

No obstante, a mediados de los 2000, su meteórica carrera comenzó a desintegrarse de la misma forma que se forjó. Desde entonces, el actor no ha vuelto a recuperar su estatus. Ahora, en declaraciones a GQ, el actor ha revelado cuáles han sido las experiencias que acabaron con su carrera en Hollywood. Una carrera que desea volver a emprender.

En primer lugar, el actor achaca su desaparición de Hollywood a las lesiones. Fraser explica que en 2008, cuando estaba rodando la tercera parte de “La Momia”, comprobó que su cuerpo ya no daba para más: "Tenía que construir un exoesqueleto para mí cada día". Desde entonces, el actor se sometió a diversas cirugías, a una operación parcial de la rodilla, e incluso una reparación de las cuerdas vocales.

Por otro lado, el actor explica que pasó por un divorcio y que se cambió de casa en varias ocasiones: "Estaba pasando por cosas que te moldean y cambian y para las que no estás preparado hasta que pasas por ellas". Sin embargo, el hecho que marcó su carrera, tal y como apunta en la entrevista, fue la agresión sexual que asegura que sufrió en verano de 2003.

Según narra en su entrevista, los hechos tuvieron lugar durante un almuerzo organizado por la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA). Durante este evento, uno de los directores de la organización, Philip Berk, manoseó al actor, una acción que recuerda en la entrevista.

"Su mano izquierda se movió alrededor hasta agarrar mi nalga, y uno de sus dedos me tocó en la parte que hay entre el culo y los testículos. Y empezó a moverlo... me sentí enfermo, como si fuera un niño pequeño. Sentí como si tuviera una bola en la garganta y pensaba que me iba a echar a llorar".

Tras este momento, Brendan sopesó denunciar el hecho. Sin embargo, el miedo a enfrentarse a las posibles consecuencias le empujaron a no hacerlo. A pesar de ello, siempre se ha culpado por no haberlo denunciado antes: "Me culpaba a mí mismo y me sentía fatal".

El actor explicaba que durante los primeros meses, llegó incluso a intentar quitarle hierro al asunto: "Me decía... 'Esto no es nada, este tipo se movió por ahí y me manoseó". A continuación, el actor explica que a partir de entonces dejaron de llamarle: "El verano pasó y no recuerdo qué película hice después. Hizo que me recluyera. Me convirtió en huraño. No sé si esto provocó alguna reacción en el grupo, con la HFPA. Pero el silencio fue ensordecedor. El trabajo empezó a marchitarse para mí. En mi mente al menos me habían arrebatado algo..."

De hecho, reconoce que a día de hoy sigue aterrorizado: "¿Sigo teniendo miedo? Totalmente. ¿Siento que tengo que decir algo? Totalmente. ¿He querido hacerlo muchas, muchas veces? Totalmente. ¿Me he parado a mí mismo? Totalmente?". Sin embargo, y a pesar de todo lo vivido, el actor espera a recuperar su estatus como actor. De hecho, durante estas semanas podremos verle en la gran pantalla con 'Todo el Dinero del Mundo'. Una película con la que el actor quiere recuperar la senda perdida.