Esta semana, las autoridades estatales adelantaron que “blindarán” el proceso electoral que ya está en curso. El aserto gubernamental es dable y deseable, nadie en su sano juicio apelaría porque el transitar hacia el 4 de junio no sea el más pulcro posible. 

La sociedad debiera exigir que la mano oficial –no sólo del Estado, sino también de los Ayuntamientos- no se involucre generando condiciones inequitativas para los contendientes. 

Es por ello que es plausible que el Gobierno de Coahuila haya adelantado que buscará generar un consenso entre los gobiernos Federal y municipales para que los apoyos sociales que se entregan a una parte de la sociedad no vengan a inclinar la balanza para algún aspirante partidista. 

Seamos sinceros, todos los partidos políticos sin distinción han utilizado este tipo de programas sociales para generar parcelas clientelares en algunos grupos de la población. Muchas veces, estos apoyos son utilizados como prebendas para quienes decidan apoyar a algún candidato, pero también han funcionado para retirar su entrega y así castigar a quienes deciden no apoyar a cierto candidato. 

Para cualquier democracia, estas actitudes son indeseables aunque con el paso de los años hayan tomado un fuerte arraigo en el País. 

Esto debiera generar un consenso en los diferentes niveles de gobierno, pero llevando a cumplir cabalmente como lo que prometen de entrada. 

Es cierto, este tipo de apoyos no se puede suspender del todo, sobre todo ante la situación precaria que pudiera prevalecer en algún sector de la población y que el congelamiento en la entrega de los programas, pudiera agravar las condiciones no aptas en las que (sobre)vive. 

Asimismo en el término de “blindaje” habrá que voltear a ver el tema de la seguridad. Es cierto que los niveles de delincuencia han tenido un declive en los últimos años. 

Zonas que en antaño los grupos de la delincuencia organizada dominaban por completo, hoy los poderes establecidos han retomado el control. 

Hace algunas semanas, el Instituto Electoral de Coahuila subrayó que hoy en el Estado –visto desde la distribución de distritos- no hay “focos rojos” por el tema de la criminalidad.

Es deseable que ese ambiente se mantenga en los próximos meses, para que un agente externo pueda incidir en los resultados. 

En todo esto, los diferentes niveles de Gobierno no son los únicos responsables de hacer prevalecer el Estado de Derecho y la equidad en el proceso electoral. La sociedad, como en gran parte de las acciones, debiera jugar también un papel fundamental. 

Cada uno de nosotros debiéramos poner lupa en el actuar de los próximos meses para evitar que algo venga a transgredir el orden que debe prevalecer en el proceso electoral.

Sólo así, con la  sociedad y el gobierno actuando de manera conjunto en pro de la democracia, deberemos afianzar sus cimientos. 

Arranca proceso de inscripción para independientes

Esta semana también comenzó oficialmente el proceso de inscripciones para los candidatos independientes que aspiran a un cargo público en Coahuila. 

El camino será un tanto largo, ya que hasta marzo conoceremos quiénes oficialmente alcanzaron a entrar en una boleta. 

Las autoridades han reiterado en varias ocasiones que no habrá trabas para los aspirantes sin partido. 

En las próximas semanas iremos viendo si esa promesa es una realidad, y así, los ciudadanos que buscan asumir un cargo sin el respaldo de unas siglas partidistas logran tener un peso en este proceso electoral, como se ha tenido en otras entidades. 

El juego electoral está en marcha, veremos si las reglas fueron las mejores.