Aunque aún no asume funciones, la alcaldesa priísta electa de Piedras Negras, Norma Treviño Galindo, ya dio de qué hablar, luego de contratar, a un costo, que trascendió fue de 500 mil dólares, a la cantante Belinda para que actuara en la boda de su hijo Franco González Treviño.

El joven, de oficio veterinario, contrajo matrimonio con Alessia Ramos, el pasado sábado 7 de agosto en San Miguel de Allende, Guanajuato.

Antes de participar y ganar la elección del pasado 6 de junio a la presidencia municipal del municipio fronterizo, Treviño Galindo reportó ingresos netos por 36 mil pesos mensuales, entre su función como coordinadora en ese municipio de la Secretaría de Desarrollo Social y por actividad industrial o comercial.

LOS EVENTOS

El 6 de agosto, un día antes de la ceremonia religiosa, la pareja ofreció una actividad de “rompehielos”, en la Terraza Rosewood, a las 19:00 horas.

Al día siguiente, la ceremonia religiosa se llevó a cabo por la tarde en el Templo de San Francisco, para posteriormente, en los salones del Hotel Rosewood, efectuarse la recepción. Ambos eventos de rigurosa etiqueta.

Rosewood es un hotel cinco estrellas, cuyas tarifas oscilan entre los 7 mil 900 y 10 mil 500 pesos por noche.

A la recepción, principalmente, acudió parte de la clase política nigropetense y del estado, entre ellos ex alcaldes de Piedras Negras, ex diputados, diputados locales, entre otros políticos. Asistieron alrededor de 400 invitados.

El papá de la novia es Javier Ramos, también de Piedras Negras, pero avecindado en Monterrey. Era propietario de una maquiladora que procesaba hilos quirúrgicos, aunque fuentes reportan que hace muchos años que vendió el negocio.

Asistentes al evento, que solicitaron no se publicaran sus nombres, admitieron que el evento “estuvo a todo lujo” y que la sorpresa mayor para ellos fue cuando anunciaron la actuación de la artista Belinda.