Tras las investigaciones que se realizan en Parras de la Fuente por el asalto a un autobús de pasajeros, caso en el que un delincuente y un viajante murieron y otros pasajeros resultaron lesionados por balas, las autoridades estatales definen que los delincuentes pertenecen a una banda organizada que es originaria de Michoacán.

Aunque se rumoró que los delincuentes podrían pertenecer a una generación reciente de un grupo delictivo que operaba en la Región Laguna a fines de los 90, dentro de las investigaciones quedó totalmente descartado.

Personal encargado de las investigaciones especificó que al ser identificado el delincuente que murió, se estableció su antecedente delictivo como miembro de una banda de asaltantes originaria de Michoacán, sin antecedentes en Coahuila o en la región donde ocurrieron los últimos hechos.

La misma fuente reveló que dentro de las investigaciones ya se recabaron testimonios y entrevistas con todos los pasajeros y con los choferes, estos testimonios coinciden en que la única persona que accionó un arma de fuego fue el asaltante que escapó.  Además, con las pruebas de balística se confirmó que el asaltante muerto y los pasajeros, tanto la víctima mortal como los que resultaron lesionados, recibieron impactos de bala por un arma distinta a la que traía el delincuente que murió.

El militar que viajaba en el autobús llevaba consigo su arma de cargo pero no la portada a la mano durante los hechos, y se descartó como involucrada en las lesiones.

En la información recabada durante las entrevistas a los testigos, se establece que el soldado viajaba con ropa de civil y que al ser registrado por uno de los dos delincuentes, forcejeó con él y por el forcejeo el otro hombre se puso nervioso y comenzó a realizar disparos, para después ordenar el chofer que detuviera la marcha y bajara del camión.

Otros dos delincuentes seguían al camión a bordo de una camioneta, en la que luego el sobreviviente logró huir con rumbo desconocido.

El asalto al camión de pasajeros de la línea Futura se registró en la carretera Torreón, a la altura del tramo La Cuchilla.

Daniel Ángel Huereca, originario de Nuevo León, es quien murió abrazando a su hija de 10 años.