Reos del penal de Topo Chico, en Monterrey, Nuevo León, le prendieron fuego a contenedores de basura de los patios sur y norte del reclusorio, lo que activó las alertas antes un posible motín.
De acuerdo con el comisario de la Agencia de Administración Penitenciaria, Antonio Caballero, los internos realizaron los disturbios debido al cambio de reos ambulatorios. “El incendio que se suscitó fue por el desconocimiento de la operación interna que obedece a movimientos de manera ordinaria, que se han estado haciendo desde los acontecimientos que ustedes ya conocen y que se han estado haciendo cada mes y medio, cada dos meses, de manera cotidiana.

“Esto se debe a que la incertidumbre de que los internos sean trasladados a otros penales o penales de la Federación, por ese desconocimiento, se manifestaron algunos, no todos”, dijo el funcionario.

Tras descartar un motín, el funcionario explicó que los internos fueron quienes apagaron el incendio “originado por tres o cuatro reclusos” y señaló: “No hay ningún herido, Y lo quiero recalcar, no hay ningún motín, no hay traslado a ningún centro penitenciario de la localidad y mucho menos de la Federación”.

De acuerdo con versiones de algunos vecinos del penal, alrededor de las 23:30 horas de la noche del lunes 26 de julio, se escucharon dos ráfagas de metralleta en el interior del reclusorio cerca de la colonia Del Maestro.

A partir de ese momento y a través de redes sociales, se alertó sobre detonaciones de arma de fuego, gritos y enfrentamientos, lo que ocasionó la movilización de los elementos de Fuerza Civil, de la Agencia Estatal de Investigaciones, del Ejército y de la Policía Militar, así como de bomberos.

En tanto, familiares de los internos se reunieron afuera del penal en espera de que se les informara sobre la situación de sus familiares.

De acuerdo con el comisario de la Agencia de Administración Penitenciaria, los familiares ingresaron el penal de Topo Chico después de las 0:00 de este martes 26 de julio. “Se está organizando flancos de trabajo para dejarlos pasar de manera ordenada, de 20 en 20, como lo hemos hecho en otras ocasiones para que tengan la certeza de que sus familiares que están recluidos en este centro están tranquilos y sanos”.

En febrero pasado, un enfrentamiento entre dos grupos de reos ocurrido en el interior del penal de Topo Chico dejó un saldo de 49 personas muertas y 12 heridos