Automatización fiscal inhibirá la corrupción

En el proceso automatización de la fiscalización en México el CEO de Facturador.com, Marco Erosa, advierte que tanto personas físicas como morales deben ponerse a la par de la revolución tecnológica que emprendió el SAT tras la reforma fiscal

Ciudad de México. Los procesos de adopción tecnológica se van acortando por lo que en dos años el envío de la contabilidad electrónica será un hecho regular y para entonces los contribuyentes deberán prepararse para la auditoria electrónica; el siguiente paso.

En el proceso automatización de la fiscalización en México el CEO de Facturador.com, Marco Erosa, advierte que tanto personas físicas como morales deben ponerse a la par de la revolución tecnológica que emprendió el SAT tras la reforma fiscal.

En materia de contabilidad  electrónica por ejemplo -obligatorio para todas las empresas  y personas físicas que no usen el sistema Mis Cuentas-  ha generado mucho desconocimiento,  lo que a su vez ha provocado una falta de cumplimiento que no es propia de los contribuyentes sino que incluso afecta a algunos contadores públicos.

El empresario advirtió que lo que se está generando es una nueva cultura fiscal, que en su opinión es mejor atendiendo a lo que viene que es la auditoria electrónica, herramienta del SAT como instrumento de vigilancia de cumplimiento.

El año pasado, precisó,  para el SAT fue uno de los años que más ha recaudado,  lo que viene como resultado  de esos sistemas de fiscalización que empezaron con la facturación en línea.
 
Luego entonces, la respuesta de los empresarios a estas acciones tienen que acerase cada vez más a la tecnologías apoyándose en sistemas más eficientes lo que va a permitir al SAT recaudar más, pero también a las empresas les permitirá ser más eficientes.

Para acercarse a la tecnología, recordó,  hay una serie de servicios que son muy económicos,  desde usar el buzón tributario del SAT,  hasta plataformas particulares que ofrecen otros servicios como el timbrado de nómina.

Los contribuyentes, exhortó  deben aprovechar  esta revolución tecnológica para exigir la ampliación de la base gravable y que sea más transparente y más eficiente el uso de los recursos.

La tecnología, insistió,  ayuda a transparentar los procesos fiscales y a eliminar la corrupción, de hecho, está convencido de que la adopción de la tecnología va primero en las empresas, luego en la sociedad, después en las universidades y por último en los gobiernos.