Tras dos días de búsqueda, familiares de Miguel Ángel, de 52 años, lograron encontrarlo, pero sin vida recostado en el interno de un auto, en un lote que se usa como taller en la colonia San José de los Altos.

En el cruce de San Pablo y San Fidencio, Raúl Iracheta Jiménez, propietario del lugar, fue informado por familiares de Miguel Ángel que lo habían visto en el interior de uno de los autos, llamando al número de emergencias, 911, para solicitar una ambulancia.

Los paramédicos llegaron al mencionado lugar donde se entrevistaron con Rogelio, hermano del finado, quien informó que Miguel estaba desaparecido desde hace dos días.

Manifestó que su hermano padecía de alcoholismo, pero nunca se había tardado tanto en volver a casa y eso los tenía preocupados.

Sin embargo, Miguel Ángel ya tenía por lo menos dos días sin vida.

Personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) acudió para tomar conocimiento del incidente y después de recabar información, realizar entrevistas y llevar a cabo las diligencias pertinentes ordenaron el levantamiento del cuerpo.

Posteriormente el cadáver fue trasladado a las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo), donde se determinaría la causa de la muerte y finalmente entregarían el cuerpo a los familiares.