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Aumentan las mujeres infieles, y no necesariamente es culpa del hombre
El sexo femenino ha sido una de las imágenes más expuestas en el campo de la infidelidad. Constantemente las mujeres buscan el placer por medio de otras personas, más que sus esposos o novios; posibles razones de que su hombre ya no le da lo que antes sentían, pero el número de mujeres continúa ascendiendo.
Diversas encuestas han tratado de desvelar este misterio. Algunos portales web como Gleeden y ACV (alma, corazón y vida) admiten que las mujeres quieren a un hombre maduro, pero cuando se encuentran en la cama lo quieren más jóvenes; razón por la que no la pueden hallar dicha característica en sus esposos. Principalmente, las mujeres buscan placer en hombres más jóvenes, que están más “llenos de vida y energía”, pues, de acuerdo con ACV, las hacen sentir más confiadas en sí mismas, más femeninas y jóvenes.
Hace poco la psicoanalista, Esther Perel, publicó su nuevo libro Estado de las Aventuras: Repensando la Inifelidad, donde especifica que hubo un aumento de 40% de mujeres que son infieles a sus hombres.
De acuerdo con el tomo de Perel se especifica que las esposas son muejres felices, con esposos que las mantienen contentas, satisfechas, con hijos adorables y un estado económico estable. Sin embargo, estas mujeres se sienten incompletas.
De acuerdo con la información de CNN, dichas esposas admiten ser más especiales, únicas, amables, tiernas con sus esposos; algo que no lo exhiben con las demás personas, pero su modo más “aventurera” lo utilizan más con otras personas para ser más creativa, una forma rebelde en contra de la gran unión que ha construido a lado de su conyugue que, en ocasiones, lo ha encontrado sofocante.
Esta generación de mujeres ha tomado el control de su vida, decidiendo lo que es mejor para ellas y fortalecer su relación con su esposo mientras libera su tensión de presiones personales a base de la seducción de otro hombre más joven. Ellas no buscaban la forma de retener la tentación de ser infiel, exigían poder salirse de la base normal de la familia y experimentar en algo diferente.