Durante las vacaciones escolares decembrinas se registra un incremento en los accidentes infantiles que ocurren principalmente en el hogar, en los sitios de recreo y en la vía pública.

Hacer de la casa un sitio seguro, mantener a los infantes ocupados en actividades acordes a su edad y no dejarlos bajo el cuidado o custodia de algún otro niño o de un adulto mayor, son medidas esenciales para evitar desgracias.

Rocío Galván Hernández, especialista en Urgencias Médicas y subdirectora del Hospital General de Zona No. 1 del IMSS en Coahuila, explica que en las vacaciones decembrinas el sitio donde se presenta el mayor número de accidentes es el hogar, en parte porque el clima frío impide que las niñas y los niños salgan a jugar a la calle o a los parques.

El principal motivo de ingreso al hospital son las caídas, en su mayoría con golpes en la cabeza y en algunos casos de suma gravedad.

El segundo lugar lo ocupan los machucones en extremidades, y el tercer lugar lo tienen las quemaduras por calefactores, agua y en algunos casos por pirotecnia.

Entre las acciones preventivas más importantes destaca el no dejar a los pequeños sin vigilancia en casa, sobre todo cuando estén en una habitación donde haya un calentador encendido, velas o algún otro artículo ígneo.

Las medidas de precaución deben establecerse tomando en consideración los riesgos propios de cada vivienda (por ejemplo, si es de una o de dos plantas), y las edades de los infantes.

Ante todo es importante platicar con ellos sobre los riesgos que existen, no perderlos de vista y en caso de acudir a los parques para practicar deporte, hacerlo con los elementos de protección necesarios.

Si bien no se puede hablar de que haya un incremento considerable, es un hecho que durante las vacaciones sí aumentan los ingresos por accidente a los servicios de urgencias pediátricas, y en tal sentido, la mayor recomendación que se puede hacer es no perder de vista a los menores, y si por razones de clima deben permanecer dentro de casa, procurar ocuparlos con juegos de mesa o de video para evitar que corran y brinquen dentro del hogar.

Cómo evitarlos 
> Quemaduras: Se pueden prevenir evitando la entrada de los niños a la cocina.
> Ahogamiento: Nunca debe dejarse al niño solo en la bañera ni con cualquier recipiente con agua. 
> Envenenamientos: Los medicamentos siempre deben colocarse en alto y en un armario bajo llave. 
> Las bebidas alcohólicas deben guardarse en armarios con llave, en lugares inaccesibles para los niños. 
> Los productos de limpieza y sustancias químicas se deben guardar en sus envases originales, a ser posible con tapón de seguridad, no se deben poner nunca en botellas de agua o de otras bebidas pues se pueden confundir y producir un envenenamiento. 
> Asfixia y atragantamiento: Evitar bolsas de plástico al alcance de los niños, es conveniente anudarlas antes de tirarlas.