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Aumenta el Banco de México las tasas de interés por primera vez desde 2008
MÉXICO, DF. El Banco de México decidió este jueves un incremento de un cuarto de punto porcentual en su tasa de interés, la referencia para el costo de los créditos de empresas y familias, que pasó de 3 a 3.25 por ciento anual, en una acción en línea con la adoptada un día antes en Estados Unidos y que, adicionalmente, busca evitar una mayor depreciación del peso.
La medida fue tomada un día después de que el Banco de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed, banco central) anunciara un incremento también de un cuarto de punto en su tasa de referencia.
El Banco de México no realizaba un aumento de la tasa de interés de referencia desde el 15 de agosto de 2008, cuando la economía mundial se precipitaba a la mayor recesión en ocho décadas, cuando las elevó de 8 a 8.25 por ciento.
De entonces a la fecha, el indicador de referencia del costo del dinero y del premio a los ahorradores en México fue reducido hasta el nivel de 3 por ciento anual, en el que se encontraba desde el 6 de junio de 2014 y que este jueves fue modificado a 3.25 por ciento.
"A pesar de que el escenario central sobre el comportamiento de la inflación para el corto y el mediano plazo es congruente con la consolidación de la convergencia de ésta al objetivo permanente de 3 por ciento, la Junta de Gobierno ha decidido incrementar el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día, para ubicarla en 3.25 por ciento", dijo el banco Central este jueves en un comunicado.
La decisión, añadió, es en respuesta principalmente al incremento de 25 puntos base en el rango objetivo para la tasa de referencia de la Reserva Federal de Estados Unidos, el cual, en ausencia del citado ajuste en el objetivo de nuestra tasa de interés de referencia, podría generar una depreciación adicional del peso desordenada en la cotización de la moneda nacional y, así, afectar las expectativas inflacionarias y a la inflación misma.
"En todo caso la Junta de Gobierno seguirá atenta a la evolución de todos los determinantes de la inflación y sus expectativas para horizontes de mediano y largo plazo, tanto externos como internos, en particular a la postura monetaria relativa entre México y Estados Unidos, al traspaso de movimientos del tipo de cambio a los precios al consumidor, así como a la evolución del grado de holgura en la economía.
Esto con el fin de estar en posibilidad de tomar medidas adicionales con toda flexibilidad y en el momento en que las condiciones lo requieran, para consolidar la convergencia eficiente de la inflación al objetivo de 3 por ciento".