En un país que necesita del ahorro, porque ni siquiera es parte de la cultura, tampoco hay incentivos, y por el contrario, los ahorradores, ya sea grandes inversionistas o toda la ciudadanía recibirán muy pocos intereses debido a que el Banco de México (Banxico) disminuyó la tasa de interés interbancaria y aumentó la inflación, explicó el economista Antonio Serrano. 

El efecto que tendrá en el país que el Banco de México baje la tasa de interés interbancario al 4.5 por ciento y que la inflación esté casi al 4 por ciento, va a provocar que los inversionistas no tengan intención de depositar su dinero en algún instrumento financiero, porque el rendimiento es prácticamente nulo. 

A los ciudadanos que tienen dinero ahorrado, también se les reduce su rendimiento, y esto no incentiva a que más gente quiera ahorrar, incluso los orilla a sacar su dinero de bancos y otros instrumentos financieros. 

“La gente está teniendo reducciones salariales y ahora le das un ‘golpanazo’ tremendo con tasas de interés muy bajas. La gente que tenga algo de dinero va a preferir gastarlo que ahorrar”, dijo. 

Explicó que el Banco de México decidió bajar la tasa de interés interbancario de equilibrio de 5.5 a 4.5 por ciento, cuando éstos no pueden cumplir la demanda de dinero de empresas y ciudadanía. 

“El Banxico es el que determina el valor mínimo del dinero en el país. Al bajar la tasa de interés esperaban que también bajará la inflación, porque el costo del dinero disminuye, y el principal componente inflacionario en México es la tasa de interés”, señaló.