De acuerdo con datos de la Unidad de Integración Familiar (UNIF) de la Policía de Saltillo, hasta mediados de abril, en pleno confinamiento por la contingencia causada por el COVID-19, se han atendido más de la mitad de los casos de intento de suicidio de los que fueron registrados durante el mes de marzo.

Cifras de la UNIF indican que en marzo —cuando se dio el inicio de la cuarentena en su última semana— fueron atendidos por la dependencia 36 intentos de suicidio, mientras que durante los primeros 13 días de abril ya habían registrado 20 casos.

“Estas son intervenciones que hacemos en UNIF. Las personas llaman al 911, las pasan al área, acude el personal y empieza un protocolo, que es, primero ver cómo está la salud de la persona y si hay necesidad de trasladar al personal”, dio a conocer Patricia Moreno, titular de la Unidad.

Según el protocolo, estas intervenciones realizadas por el personal, concluyen una vez que la persona puede ser trasladada en compañía de un familiar al Centro de Salud Mental (Cesame) en Saltillo, para que ahí a su vez se genere un registro con observaciones y entregue el caso al sistema DIF para su seguimiento.

De acuerdo con Moreno, aunque estos son los datos que se tienen hasta ahora, habrá que realizarse un análisis más a fondo para observar el impacto de la pandemia en esta cantidad de casos, pues estos representan apenas al inicio de la emergencia sanitaria del COVID-19.

Apenas la noche del viernes un hombre realizó una transmisión en vivo a través de Facebook, cortándose las venas, intentando acabar con su vida.

Desde el inicio del encierro la Región Sureste de Coahuila registra 11 casos de suicidio.