Hoy uno de los capos más peligrosos, y en su tiempo, el más buscado por autoridades mexicanas y estadounidenses, recibió cadena perpetua como sentencia. Hablamos de Joaquín “El Chapo Guzmán”.

Pero minutos antes de que se supiera cual sería el destino de “El Chapo”, a la corte de Brooklyn llegó Emma Coronel, su esposa, quien durante los meses de juicio y testimonios, ha robado cámara por siempre lucir impecable, con llamativos y costosos outfits de reconocidas firmas de moda como Burberry, Chanel, Michael Kors, entre otros.

Este día no fue la excepción, el día en el que sin saber vería por última vez al capo que la sacó de su natal Durango iniciando así con una metamorfosis que ha dejado casi irreconocible a aquella joven de 18 años que ganó un certamen de belleza local en Canelas, pueblo de dicho Estado, robándose así a Joaquín Guzmán, el hombre cuyo historial de amores da casi para escribir un libro.

Hoy Emma lució discreta, vistiendo un look “clásico” con colores “básicos”: un traje sastre compuesto por pantalón de vestir y chaleco, ambos en color negro, así como una camisa holgada en color blanco. Maquillaje nude y gafas para el sol.

Hoy, la esposa del narcotraficante que figuró en el conteo de los hombres más ricos del mundo de la revista Forbes, no vistió con aquellas prendas con diseños peculiares y que juicio tras juicio portó para sentarse a escuchar los testimonios en contra de su esposo. Tampoco llevó esa leve sonrisa que lucía en su rostro antes de entrar a la corte, como si supiera que venía un golpe duro para el padre de sus gemelas, siendo esta la única oportunidad entre tener o no a “El Chapo” libre.

Ahora solo resta saber cuáles serán los planes de ella con sus hijas ahora que Guzmán Loera fue condenado cadena perpetua tras un largo juicio en el que Emma supo hasta de amores “ocultos” del “Chapo”, y con el que quedó expuesta si identidad y la de sus gemelas.