Como cada mañana, Karina Vetrano salió el miércoles a hacer deporte en un parque cercano a su casa, en Nueva York, pero en su ruta se cruzó al asesino que le quitó la vida. Su cuerpo fue encontrado por su padre con signos de abuso sexual, lo que desató conmoción en las redes sociales y una recompensa de USD 10.000 para encontrar al culpable.

La bloguera, de 30 años y más de 11 mil seguidores en Instagram (oculto al público tras el hecho), luchó antes de morir, según informaciones de la pericia.

Sus dientes estaban rotos y la víctima "presentaba numerosos hematomas", señaló la Policía.

Ese día, su padre, Philip Vetrano, no había podido acompañarla como lo hacía ocasionalmente por dolores en la espalda.

La investigación apunta a que el autor del crimen la habría ubicado gracias al sistema de localización de imágenes de la red social. A su vez, vecinos de Queens indicaron que en la zona suelen habitar numerosos vagabundos.

Al asesino le espera una eternidad en “el infierno”: madre de Karina

Por primera vez desde la muerte de su hija el pasado martes, Cathie Vetrano rompió el silencio ante la prensa el domingo para enviarle un mensaje al asesino de su hija, Karina Vetrano, a quien llamó “cobarde” e “hijo de pu…”, entre otras cosas.

“Mírenme a los ojos”, dijo Cathie Vetrano mientras se retiraba sus lentes oscuros, “que ahora voy a dirigirme a ese cobarde”.

Frente a su residencia en Howard Beach, y en compañía de su esposo Phillip, la mujer continuó: “Mi hija era una fuerza que había que tener en cuenta… Y te garantizo, hijo de put… que estarás enfrentando el peso de esa fuerza no sólo durante tu patética vida, sino también por el resto de la eternidad mientras ardas en el infierno”.

A cinco días del horrendo crimen, la familia Vetrano tiene plena confianza en que las autoridades capturarán al individuo que el martes interceptó a Karina, de 30 años, mientras corría en el parque Spring Creek, de Howard Beach, Queens.

Asesino la localizó a través de Instagram

Instagram contribuyó a la muerte de Karina Vetrano, la bloguera estadounidense que fue violada y asesinada en un parque de Nueva York, según informó la Policía a cargo del caso, la cual apunta a que el asesino la ubicó gracias al sistema de localización de la red social.

De acuerdo a las investigaciones preliminares, la joven tenía más de 12 mil seguidores de Instagram y uno de esos fans fue quien estudió todos sus movimientos habituales a través de las red social, hasta el día en que la mató.

Esta información ha alarmado a varios blogueros del rubro, quienes no ocultan sus ubicaciones cada vez que publican fotografías de sus rutinas diarias.