Saltillo.- En cachitos, y dentro de un tambo color azul, fue encontrado ayer el cuerpo de un domicilio en la colonia María de León; según los primeros informes ya comenzaba a descomponerse. 

El reporte del hallazgo fue a las 15:00 horas de ayer, pero no se dijo quién lo realizó, ya que las autoridades se mantuvieron herméticas. 

Tras el reporte al 911, se trasladaron elementos de la Policía Municipal a la calle José Eleazar Galindo Vera; ahí se encontró el cuerpo. 

La casa de fachada color verde y con una reja color negro, en la cual está colgada una lona que anuncia la renta de brincolines, fue sitiada por los agentes así como de la PGJE, asignados al área de homicidios.

El personal pericial comenzó con las diligencias para recabar las evidencias del crimen. Todo estaba muy tenso, las autoridades no daban razón de lo sucedido, ante la mirada de decenas de curiosos se movían de un lado para otro y susurraban entre ellos, como tratando de llegar a algunas conclusiones. 

En el lugar se encontraba una mujer quien no reveló su identidad, pero dijo ser tía de Mauricio Cortez Peña, quien rentaba la casa e intentaba ver si se trataba de su familiar; era retenida por los elementos, quienes le explicaron que tenía que esperar. 

“Ahí vive mi sobrino, se llama Mauricio Cortez, trabaja en la empresa Kimberly en Ramos. Ya hablé con sus papás. Ellos son de un ejido que se llama Los Estados, en NL, él ya tiene tres años viviendo aquí por su trabajo, pero ya tenía como tres días desaparecido”, dijo la tía.

Aunque en un principio se manejó que la víctima era Mauricio, luego se dio a conocer que se trataba de Juan Francisco Coronado, de 28 años, quien tenía una relación al parecer de amistad con él.