La ciencia ha demostrado tener un profundo impacto sobre el desarrollo y el crecimiento de las sociedades del mundo. Los avances que se hacen en este campo guardan el potencial para mejorar la formulación de políticas públicas, y mejorar las condiciones de vida de la población del mundo en los ámbitos de la educación o la salud. Es por ese motivo que la Unión Interparlamentaria llevó a cabo su Asamblea 139 enfocando las sesiones de trabajo y discusiones bajo el tema de "el rol del liderazgo parlamentario para la promoción de la paz y el desarrollo en una era de innovación y transformación tecnológica".

La Asamblea contó con la asistencia de más de mil 300 parlamentarios provenientes de 149 países interesados en involucrar a sus parlamentos en estos temas. Las discusiones que se gestaron en torno a este eje central tomaron aún más relevancia en un contexto internacional en el que las decisiones políticas parecerían estar siendo tomadas desde mentalidades populistas lejanas a los hechos y a la información confiable. Ante un panorama en el que las noticias falsas han alterado el funcionamiento de la política en las esferas nacionales, la ciencia y la evidencia son una herramienta fundamental para combatir los desafíos que suponen la desinformación y la manipulación de la misma. La Asamblea contó también con el apoyo de la Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN), la Agencia Internacional para la Energía Renovable (Irena) y Waterlex, iniciativa enfocada para una gobernanza sostenible para el manejo del agua en el mundo.

Los esfuerzos de la UIP en esta Asamblea también permitieron celebrar el 70 Aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, donde se lanzó también una guía de la UIP para la protección de la libertad de expresión. Aunado a lo anterior, la Asamblea permitió abordar múltiples temas de importancia internacional, tales como el sexismo y acoso sexual en el ámbito parlamentario, desarmamento, contra-terrorismo, los Objetivos de Desarrollo Sostenible, derechos humanos, migración, entre otros.

Si bien todos estos temas que discutimos —los cuales son inherentes a la agenda internacional— cuentan con una relevancia indescriptible, la Unión Interparlamentaria alcanzó un logro adicional de gran valor, particularmente con las recientes declaraciones realizadas por la Organización de las Naciones Unidas, donde se advirtió los efectos que tendría el probable incremento de la temperatura del planeta en 1.5º C. Ante la apremiante problemática de competencia global, la UIP aprobó durante el último día de la Asamblea una resolución sobre un punto de emergencia, referente a la urgencia de promover las ambiciosas y necesarias transformaciones, desde los parlamentos del mundo, para preservar un equilibrio ambiental. La resolución titulada Cambio climático: no nos permitamos cruzar la línea llama a los parlamentarios miembros de la UIP a tomar acciones decisivas —tales como iniciar la movilización de recursos y la implementación de estrategias de presupuesto accesibles— que permitan prevenir la crisis ambiental pronosticada por la ONU, la cual amenaza con golpear fuertemente al planeta en tan solo una década.

La importancia de esta Resolución —promovida por una coalición de Pequeños Estados Insulares en Desarrollo— no puede ser subestimada. Como legisladores jugamos un papel fundamental para la implementación de los acuerdos internacionales, las leyes y las políticas públicas necesarias para realizar la transformación hacia el desarrollo sostenible que nuestro planeta necesita. Por lo tanto, hay que decirlo: haber logrado una movilización masiva desde la UIP para reconocer la urgencia de combatir el cambio climático no es un logro menor, pues es en las manos de los parlamentarios que recaerá una gran parte de la responsabilidad si se desea revertir los patrones climáticos que amenazan a nuestra humanidad. Es momento de que el mundo logre construir alianzas para esta importante empresa, y en este sentido la Unión Interparlamentaria está dando grandes pasos que deben ser reconocidos por la comunidad internacional.