Un solitario delincuente se puso tan nervioso al momento en que pretendía asaltar una sucursal bancaria que se fue del lugar sin el botín, pues la empleada a la que le exigió el dinero no lo hizo con la rapidez que el ladrón esperaba. 

La afectada Norma G., de 25 años, solicitó la intervención de las autoridades ante el temor de que el ladrón regresara a cobrar venganza; se aproximaron unidades de la Preventiva Municipal y Estatal. 

La trabajadora reveló que ayer, alrededor de las 09:00 horas, inició su jornada laboral y el primer cliente que arribó fue una persona de complexión delgada, tez morena, estatura aproximada de 1.65 metros, y se acercó al filtro de la caja 2. 

Dijo que, el ladrón, sin decir palabra alguna, le entregó un recado intimidatorio con la frase “esto es un asalto, dame el dinero que hay en la caja”. 

Asegura que se mantuvo inmóvil por el temor de que el ladrón la dañara. Asimismo, dijo que al reaccionar tardó en buscar las llaves donde resguarda el dinero. Su lentitud provocó la desesperación del delincuente que optó por retirarse. 

Al lugar se presentó un agente del Ministerio Público adscrito a la Unidad de Denuncia Inmediata (UDI) para levantar un acta por robo en grado de tentativa.