La salud mental de los trabajadores de la industria de Saltillo se ha visto afectada durante esta pandemia de COVID-19, ya que cada vez más pacientes acuden por trastornos de sueño o insomnio y ataques de ansiedad al IMSS; sin embargo, este fenómeno no ha sido registrado por organismos como la Coparmex Coahuila Sureste.

“Ahorita lo que más vemos es patologías del orden del insomnio, la gente no duerme por tanta ansiedad… Tuve que sacar mi bloc de incapacidades para incapacitar a los hombres, no te digo 15 días, sino meses, porque no pueden con el ataque de pánico. Muchachitos de 20, 25, 30 años, con pánico, y los hombres de 40 en urgencias infartados, eso no lo veíamos”, explicó la doctora Lorena de la Torre, la única psiquiatra de la Clínica 1 del Seguro Social, con 26 años de trayectoria y quien además trabaja en el Centro Estatal de Salud Mental (Cesame).

Además, la psiquiatra consideró que las industrias extranjeras, sobre todo de procedencia asiática, explotan laboralmente a sus trabajadores, lo cual generó padecimientos mentales en los empleados, como operarios, montacarguistas, soldadores, costureros, empleados del sector automotriz.

“Tranquilamente de uno a cuatro” aumentó el número de pacientes que acude a la Clínica 1 del IMSS por cuestiones psiquiátricas en lo que va de la pandemia, en comparación con el periodo anterior a la emergencia sanitaria, de acuerdo con la especialista.

En el caso del insomnio y trastornos de sueño, resaltó que esto termina por afectar la hipófisis, que es la glándula maestra que a nivel cerebral controla las demás hormonas, por lo que si se desorganiza, produce daños en todo el organismo, como tiroides, insulina, colesterol; entonces el paciente ya no solo necesitará medicamentos para esto, sino para los demás padecimientos.

En contraste, la Confederación Patronal de la República Mexicana en esta región del estado señaló que no tienen información sobre aumento de estos padecimientos en la salud mental de los trabajadores.

“No tenemos información, no hemos tenido empresas que compartan o que tengan la inquietud de que se hayan incrementado las incapacidades por ese tema; a lo mejor son casos aislados”, señaló Miguel Monroy, director general de Coparmex Coahuila Sureste.

REPUNTAN CASOS DE DEPRESIÓN

Los casos de depresión aumentaron en Coahuila, y la cifra más reciente se colocó como la tercera más alta durante el primer semestre del año desde que se tiene registro de este padecimiento mental en el Boletín Epidemiológico de la Secretaría de Salud federal.

Este año se contabilizaron 772 atenciones médicas por depresión en el estado, hasta la semana 25 (que cerró el 26 de junio); con lo cual rebasó en 34.72 por ciento los casos del 2020, cuando se reportaron 573 en el mismo periodo.

La cifra más alta en el primer semestre del año se documentó en 2014, cuando la depresión empezó a ser incluida en el Boletín Epidemiológico, con 863 casos por este padecimiento. En el segundo puesto se colocó 2019, con 787 casos.

La depresión se caracteriza por tristeza persistente y la pérdida de interés en actividades que normalmente se disfrutaban, así como por la incapacidad para realizar tareas cotidianas, durante al menos dos meses.