“Ahora resulta que ya nadie puede comer con sus amigos, nada más Riquelme, o qué”, soltó molesto Noé Garza Flores, ante decenas de reporteros el miércoles 19 de agosto. Intentaba desenredar la telaraña que se fue tejiendo a su alrededor y que terminó con su cese fulminante como Secretario de Desarrollo Rural del Gobierno del Estado.

La desgracia del viejo político priísta se gestó tiempo atrás, cuando su nombre surgió en algunas columnas políticas, que si fuera el nuevo “Bronco” de Coahuila, que si tenía aspiraciones, que si quería ser Gobernador. Después el rumor se materializó. En julio un grupo de amigos le organizó una comida en un rancho de Nadadores, por su cumpleaños; para Noé Garza ese fue el punto de inflexión. En Palacio de Gobierno no vieron con buenos ojos el festejo.

El viernes 15 de agosto, en Monclova, la Secretaría de Desarrollo Rural armó un evento de apoyo a los productores y en ese marco el aún titular de esa dependencia, al dar su discurso, preguntó por los diputados: “No veo por cierto a mis amiga y amigos, los diputados locales en este evento, no sé qué pasaría. ¿Hay sesión? Bueno desde aquí les mandamos decir que revisen bien los presupuestos del año que entra, y a mis amigos y compañeros Diputados federales de todos los partidos políticos, que no regateen presupuesto para la producción de alimentos”.

La frase fue tomada como pretexto, magnificada y difundida por diversos medios para generar un escándalo artificial. El lunes 17 Víctor Zamora, secretario de Gobierno le respondió: “Anda mal el compañero Secretario, debe tener un problema de salud mental”.

Garza Flores consiguió el video del evento del 15 de agosto y citó a rueda de prensa el miércoles 19, ahí lo presentó y aseguró que en ningún momento le faltó al respeto a los diputados y nunca retó al Gobernador. Aprovechó el momento para pedirle a Zamora que se practicara el examen antidoping y todas las pruebas de control y confianza.

El affaire terminó el lunes 24 de agosto con el cese de Noé y el nombramiento de Alfio Vega como nuevo Secretario de Desarrollo Rural. Todo se le atribuiría a la mención de los diputados en el discurso del 15 de agosto, pero no fue eso lo que derivó en la salida de Garza Flores, sino una serie de declaraciones que muy pocos conocen y que realizó ese mismo día, en Monclova, al ser entrevistado por los reporteros.

“Si ya me apuntaron, yo no me desborro”, declaró el agrónomo de bigote completamente cano, y abundó: “yo estoy levantando la mano”. Ese día no descartó la posibilidad de buscar la candidatura del PRI o bien lanzarse como candidato independiente. Amigo del Gobernador Electo de Nuevo León, Jaime Rodríguez, “El Bronco”, Noé Garza inició ahí su propia cabalgata.

Pero algo debe tener el ambiente de Monclova, 12 días después, Miguel Riquelme escogió el mismo municipio para destaparse como aspirante a la candidatura priísta al Gobierno del Estado. Diferente a Garza Flores, el bautizo del Alcalde de Torreón fue al más puro estilo del PRI, en horario de trabajo, con funcionarios del Gobierno del Estado apoyándolo y en un municipio distinto al que debería estar gobernando.

Riquelme inició su acto político a las 11 de la mañana, en el salón “El Patio” ante cientos de militantes priístas. A pesar de ser jueves ahí estaba Jeanne Snydelaar, Coordinadora Regional de Programas Estatales del Gobierno del Estado.

Según las crónicas periodísticas del evento, Riquelme pronunció un discurso que duró más de una hora, y lo más relevante que dijo fue: “Me di una escapadita de Torreón”.

Pero después de tanto brinco y folclor, los eventos dejan claro que comenzó ya la carrera por la Gubernatura y con ello inició también el fin del sexenio.

*El presenta artículo expone mi punto de vista, no la opinión del Gobierno Municipal en el que laboro.

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