Apuestas: Legalidad, impuestos del gobierno, etc
El fútbol por méritos propios o casualidades de la historia es el deporte más popular a nivel mundial. Solo otros deportes pueden hacerle sombra en regiones muy concretas del mundo pero ninguno mueve tantas voluntades en escala planetaria.
La versión profesional de este deporte está representado por grandes ligas en Europa principalmente y América. El dinero de la publicidad en las televisiones hace de este deporte un negocio muy rentable. No parece conocer un rival que pueda competir con él cuando ciudadanos de países diversos quieren compartir una afición deportiva.
Internet, el medio perfecto para valorar todas las estadísticas
Las apuestas deportivas e internet han entrado con fuerza y para los aficionados constituye un nuevo aliciente. Las emociones que produce una ganancia económica por aciertos en un pronóstico avivan el interés y lo llevan más allá de lo deportivo.
Es curioso ver la evolución de palabras clave relacionadas con este sector en google trends. Si buscamos, por ejemplo, Apuestas México podemos advertir que existen picos con un crecimiento desmesurado en determinadas fechas. No es difícil advertir que coinciden con grandes eventos deportivos sobre todo en partidos internacionales de la selección de fútbol mexicana.
El universo de las casas de apuestas: impuestos, el estado y las regulaciones sociales
Las casas de apuestas forman un ecosistema particular. Existe un número reducido de ellas que ocupan el 80% por ciento del mercado, el otro 20% se tiene que repartir entre casas casi desconocidas que suelen tener una vida corta al fusionarse con otras o finalmente desaparecer. Las regulaciones legales en cada país pueden afectar a su actividad.
La tendencia a la fragmentación del mercado en espacios nacionales por la intervención interesada por los impuestos de los estados perjudica a los usuarios de estos servicios. La intervención de los gobiernos en lo que debería estar plenamente bajo la responsabilidad individual de cada jugador convierte en mercado en un comercio intervenido.
Para los usuarios que superen estas dificultades queda aprender a apostar con un criterio mínimamente objetivo y serio. La única técnica que puede funcionar es calcular las probabilidades de los resultados mejor que la casa de apuestas.
Con esta premisa se puede vencer a las casas de apuestas con un margen de beneficios limitado a un máximo de un pequeño tanto por ciento de lo apostado. (un 10% es una buena ganancia). Querer superar estos límites es arriesgar demasiado y termina por exponer al capital del apostante a su merma imparable y continua.
La psicología juega un papel fundamental en las apuestas. Se ha de procurar alejarse de la intuición tanto como sea posible. Solo sirve esa intuición cuando ya se ha probado con un modelo o sistema y este ha dado un margen de ganancias. Lo demás es un impulso producido por un espejismo de posibles ganancias que distorsiona completamente la realidad.
Las apuestas deportivas son un reto a la imaginación y la creatividad. Favorece las relaciones sociales con personas con las mismas inquietudes. El uso de herramientas informáticas promueve la especulación con un sistema que pueda vencer a las casas de apuestas
Existe para los más valientes un campo profesional o semiprofesional donde las apuestas es una forma alternativa o única de obtener ingresos. En este caso hay que hablar de un verdadero trabajo. No se pueden obtener unos rendimientos constantes si dedicar tiempo al análisis de partidos. Con ayuda de la opinión de otros o sin ella el dinero que se juega es el mejor motivo para tener un criterio propio y bien formado.
