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Apuesta Unicef por una youtuber para llegar a millones de jóvenes
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) nombró como embajadora de buena voluntad a la youtuber canadiense de origen indio Lilly Singh, más conocida como "Superwoman", en una apuesta sin precedentes con la que pretende adaptarse a los tiempos para llegar a millones de jóvenes.
A juzgar por las ovaciones, entusiásticos aplausos y oleadas de risas que la cómica arrancó hoy con sus muecas y chistes entre decenas de niñas presentes en la ceremonia de su presentación como embajadora de Unicef en Nueva Delhi, la organización parece haber acertado de pleno con su elección.
"Hemos aprendido que nos tenemos que adaptar, tenemos que ver quién llega a los niños, quién proporciona una plataforma para los problemas que enfrentan los menores y así es cómo descubrimos a Lilly Singh, una youtuber", explicó a Efe la representante de Unicef para la India, Yasmin Ali Haque.
Aunque reconoce que hasta ahora nunca había oído hablar del concepto de youtuber, Haque se mostró feliz de haber descubierto una nueva figura con "tan poderosa presencia" entre los niños y espera que "Superwoman" les ayude a llegar a "millones" de jóvenes.
Singh, de 28 años e hija de padres indios, cuenta con 11 millones de suscriptores en su canal principal de Youtube, donde publica desde parodias de vídeos musicales hasta "sketches" cómicos sobre las familias indias, y cuenta con otros dos millones en su canal de vídeoblogs diarios.
Tras publicar recientemente su primer libro, esta joven de melena infinita y estilo desenfadado se enfrenta ahora a un nuevo reto en su carrera, uno que ha prometido tomarse muy en serio.
"No quiere ser solo un título, definitivamente voy a promover cosas a través de mi comedia", aseveró al responder a uno de los muchos brazos de jóvenes que se peleaban desesperados por hacer una pregunta a su ídolo en el acto.
Aarushi, de 14 años, se declara una "fan muy grande" de la youtuber y las palabras se le quedan cortas al describir a Efe su felicidad por haberla visto, mientras agita una copia de Cómo ser una Bawse.
"Me siento muy bien de que sea una embajadora de buena voluntad de Unicef porque sé que es una persona muy influyente e influencia a mucha gente, especialmente jóvenes, por lo que va a hacer un cambio verdaderamente enorme en el mundo", manifestó.
Todos las niñas presentes parecen coincidir en la "motivación" que les imprime Singh, mientras otras, como Aishwara Bost, de 16 años, van un paso más allá para manifestar que su aspiración en la vida es ser "como Superwoman”.
A ningún adulto se le escapa la locura que desata la joven canadiense y su innegable capacidad para llegar a los más pequeños.
El activista por los derechos de los niños Steven Rocha, de la organización Nueve es Mío, cree que escoger a un embajador que utiliza "el medio de una persona joven", hoy en día las redes sociales, es una idea, simplemente, "brillante".