El viernes primero de enero estrenamos -además de un año nuevecito para echar a perder igual que el anterior- una nueva legislatura local, es decir, una nueva remesa de diputados que habrá de servirnos, como todas las que le preceden, para dos cosas (sí, usted sabe cuáles dos cosas).

Siendo el Poder Legislativo en Coahuila poco más que ornamental (¡vaya adorno más feo y más caro!), la instauración de un nuevo cuerpo parlamentario tendría que dar por necesidad la nota más anodina, gris, desabrida, intrascendente y equis de todo el año que tenemos por delante.

Ya usté’ sabe: Congratulaciones, autocomplacencia, cromadera de rifle (propio y ajeno), palmadas en la espalda para el Góber y éste, a su vez, palmaditas en la cabeza para sus mascotas.

Sin embargo, ese día desde temprano, junto con las postales de Feliz Año Nuevo, los memes y los piolines de mis tías, comenzó a circular en redes sociales un video de aquel acto protocolario.

Emergido no sé de dónde, el nuevo diputado panista Rodolfo Gerardo Walls hizo uso de la palabra para tirar a sus homólogos y al titular del Ejecutivo, Miguel Riquelme, algunas cuantas netas que aquí transcribo:

“Recién se ha cumplido el tercer año del período del Gobernador y en este tercer año, no cabe duda, la pandemia le ha servido como una enorme nube para ocultar la falta de logros de su Gobierno y para justificar la escasa, casi nula, obra pública en Coahuila.

“En Coahuila escasea la obra pública y las acciones de gobierno, no porque estemos en pandemia, sino por la simple y sencilla razón de que no hay dinero.  En Coahuila no hay obra porque Coahuila está en quiebra técnica y… Si bien, esta grave situación financiera no es su culpa, tampoco puede usted escudarse en ella mientras no haga nada al respecto…

“…usted (Riquelme) le debe la silla y se encuentra ahí sentado gracias a los hermanos Moreira. Usted está ahí sentado gracias a quienes impunemente saquearon a Coahuila hasta la saciedad.  

“Deber la Gubernatura a los hermanos Moreira estoy seguro, señor Gobernador, le genera un serio conflicto de lealtad. La duda es, ¿con quién está su lealtad hoy en día?… Porque hasta la fecha su silencio y su falta de acción en temas como la Mega Deuda no ha hecho más que abonar a la duda.  

“Hoy el pueblo de Coahuila sigue exigiendo y reclamando una cosa: justicia. Coahuila quiere, merece y necesita darle bote a los hermanos Moreira y en sus manos está esa posibilidad.

“Coahuila quiere y necesita darle bote a los Moreira para demostrar que no somos el hazmerreír de nadie. Coahuila quiere y necesita darle bote a los Moreira para poder dar vuelta a la página del agravio que hemos sufrido. Coahuila quiere darle bote a los Moreira porque en los últimos diez años hemos pagado más de 30 mil millones de pesos, sólo de intereses, de una deuda que a la fecha, no se sabe quién se quedó con el dinero. Coahuila quiere darle bote a los Moreira no por una cuestión de venganza, sino por una cuestión de elemental justicia y si usted cree que el pueblo de Coahuila no merece justicia, entonces usted no merece llamarse Gobernador. 

“Es hora de que pase a los hechos, le quedan tres años para demostrar que usted no solo fue un simple gerente y alcahuete de los intereses de los hermanos Moreira…”.  FIN. Corren créditos. Producción: Emilio Larrosa.

Como ya dije, nada que el coahuilense promedio con dos dedos de frente no sepa sobradamente. Pero, para ser honestos, nada tampoco que se diga muy a menudo en un contexto oficial. 

Y aunque las palabras del diputado Walls seguramente le bajaron la cruda de Año Nuevo a varios de los presentes, tampoco es como para echar campanas al vuelo, aventar pirotecnia o quemarle incienso.

Falta ver si la postura de este diputado está respaldada por toda su bancada (y por su partido) o sólo habla a título personal y, en todo caso, si es verdaderamente la postura desde la que piensan legislar o es sólo un golpe efectista para hacer algo de ruido y recuperar un mínimo de credibilidad luego de haber sido pulverizados en las pasadas elecciones.

Falta ver si mantienen esta postura sin quitar el dedo del renglón o luego, como pasa en cada legislatura, la venden por un plato de lentejas.

Porque el PAN juega de una forma muy rara ya que, cuando tiene el balón en su poder, prefiere cagarla a propósito y la revienta mejor contra la gradería. Por eso luego da la impresión de que todo está ensayado, perfectamente coreografiado.

Además, siendo honestos, el discurso no le hace mella a la hegemonía priista ni le quita el sueño a los Moreira o al Gobernador, quien acabando el acto, fue el primero en desconocer los pronunciamientos del diputado Walls: “¿Mega Deuda?… ¿Hermanos Moreira?... ¿La mujer de quién? ¡De qué me habla!”.

Bien, ojalá sea verdad que iniciamos el año con una oposición ganosa de poner el dedo en la llaga en la agenda local y sobre todos los asuntos de corrupción y desaseo administrativo rezagados; y que no empiecen más tarde a asumirse fiscales del Peje y de la Federación, en temas totalmente fuera de su competencia, que esas son nomás ganas de jugarle al güey… o al Cofiño.

Por último, no pude dejar de notar la inexistencia de esta intervención en las crónicas de los medios locales. Ningún medio le dedicó un solo renglón a esta intervención, la única que ha increpado en su cara al Gobernador  (¡y vaya que para eso se necesita valorts!), negando así una realidad que es verificable para cualquiera con acceso a Facebook, Twitter o Whatsapp. ¡En fin, que cada quien decida qué tan pachones le gusta hacer sus osos!

Mientras tanto, por esta brillante intervención le vamos a dar un crédito parcial al diputado, con muchas reservas, pues queda por demostrar mucho más que un pronunciamiento categórico. Sepan que están lejos, muy lejos de exentar y el año, como la Legislatura, apenas inicia.