Calificación: 8 de diez

Supongo que sería mucho pedir que una película ubicada en el universo de “Harry Potter”, no estuviera tan cercana a aquella saga. Que fuera una aventura aparte, individual, independiente. Es que tal vez estoy un poco harto de las precuelas, los “remakes” y demás técnicas que las grandes producciones emplean para no tener que inventar historias nuevas y garantizar los millones que recaudarán en taquilla. Dentro de este ámbito, lo más atractivo son los “spin-off”, historias aparte de un universo conocido. Lo son porque, dentro de este mundo de reciclaje cinematográfico aquí es donde hay espacio para ser, aunque sea un poco, original. “Animales Fantásticos y Dónde Encontrarlos” (“Fantastic Beasts and Where to Find Them”), debería entrar aquí, pero no lo hace del todo.

La película está hecha con el primer guion de J.K. Rowling, la autora de los siete libros de “Harry Potter”, en los que se inspiró la exitosa saga de cine. La historia se ubica en el mismo mundo, pero en vez de estar en Inglaterra está en Estados Unidos y en vez de ser en tiempos actuales, es en los años 20. Ahí seguimos a Newt Scamander, un mago inglés que llega al continente americano con un montón de creaturas mágicas, pues se encuentra escribiendo un libro al respecto. Cuando la maleta donde las transporta las dejé sueltas se involucrará con el Congreso Mágico de Estados Unidos y la misteriosa aparición de lo que parece ser una creatura asesina por las calles de Nueva York.

Tengo que decirlo de entrada: nos engañaron. Este no es un “spin-off”, es decir, una película alejada de las otras aventuras del “niño que vivió”. La trama, en apariencia está alejada (hasta temporalmente) y es mucho más sencilla, pero todo es un truco. Si creen que no hay un mago tenebroso detrás de todo esto, están muy equivocados. Y es que vale la pena agregar que, según Rowling, ya sea por creatividad propia o porque el estudio productor, Warner, se lo pidió, esta película es el comienzo de una saga de cinco filmes. ¿Apoco creían que iban a dejar a una saga tan exitosa en paz así como así? Luego de intentar emular aquel éxito con cintas como “Los Juegos del Hambre”, “Divergente” y hasta “Crepúsculo”, se han dado cuenta que sólo “Harry Potter” puede equipararse a “Harry Potter”.

Lo bueno es que Rowling está involucrada y entonces la pregunta: ¿es esta historia tan buena como aquella? No, definitivamente no. No tiene la misma magia, ni el mismo encanto. Pero sí tiene su propia magia y su propio encanto, uno muy diferente. Y ese es el gran acierto, que esta película se sienta diferente, lo cual es decir bastante en una producción repleta de varitas, organizaciones mágicas, hechizos y objetos fantásticos a los que nos acostumbraron ocho películas, cuatro de las cuales fueron hechas por el director de esta nueva, David Yates. Pero este logro sólo logra acentuar la realidad: esta cinta hubiera funcionado mejor sola. ¿Qué quiero decir con esto? Que no era necesario planear una secuela, ni mucho menos cuatro. Aunque es muy entretenida y tiene bastante corazón, esta película no puede evitar sentirse como un preludio, como una primera parte y ese es quizá su único defecto.

Porque hay que confesar, está película es mucho mejor de lo que debería. Tiene nuevos personajes interesantes, como el excéntrico protagonista, interpretado por Eddie Redmayne, así como Tina Goldstein, una bruja que busca sobresalir en su trabajo, interpretada por Katherine Waterston. Pero quienes se roban la película son Jacob Kowalski, un no-maj (la palabra norteamericana para muggle, es decir, persona que no puede usar la magia), interpretado por Dan Fogler, y Queenie Goldstein, la hermana de Tina, una encantadora bruja que lee la mente, interpretad por Alison Sudol. Y cuando digo que estos dos personajes se roban la cinta, quiero decir que sin ellos no sería ni por asomo tan buena. Ellos no sólo son más cautivadores que los protagonistas, sino que son el ancla emocional de todo el asunto.

En las otras películas, era Harry Potter quien nos llevaba de la mano descubriendo este mundo, que para él era nuevo. Aquí es Kowalski quien nos muestra las nuevas creaturas. Toda esta aventura la vemos a través de él y para no adelantar demasiado sólo diré que gracias a este personaje el final de la cinta es emocionalmente muy poderoso, casi hasta bello. El resto de la cinta, o al menos en parte, es una aventura sencilla. Las creaturas escapan y Newt debe encontrarlas. En el camino vamos conociéndolas, viendo qué habilidades tienen y cuáles son sus características. Esto recuerda un poco a la inocencia de ver las primeras cintas de “Potter”. Una aventura mágica entretenida, que sea capaz de sorprendernos. Que tenga precisamente eso de lo que se nutre: magia. Un hechizo para captar la atención del espectador.

La cinta lo tiene. Y no creo que tenga mucho que ver con la idea de que está ubicada en otro tiempo. Las cosas, en general, funcionan de la misma forma, así que salvo los atuendos y vehículos, nada ha cambiado. Lo interesante es que se nota un cambio de tono deliberado. La intención de explorar el mundo mágico más allá de las fronteras de Hogwarts. El problema es cuando hay otro conflicto, uno que se desarrolla casi a la par y que casi podríamos quitarlo sin ningún problema. Hay una secta de gente anti-magos y un misterioso hombre que trama un complot y parece estar detrás de unos ataques misteriosos. Todo esto entorpece la aventura de Newt, que, por su parte cumple, de forma modesta, con sus ambiciones de entretener.

Lo repito: la cinta busca ser una gran franquicia. Lo será, por supuesto. A estas alturas todo lo que tenga el nombre de “Harry Potter” es casi un éxito garantizado. Creo que fanáticos de la saga estarán muy contentos de escuchar esta noticia. Pero yo, que no me considero un gran fan, aunque sí me gustan las películas, debo decir que hubiera preferido que quitaran de “Animales Fantásticos” todos los elementos que la atan con las futuras películas. Sobre todo la presencia de cierto mago oscuro (que no es Voldemort, por supuesto). Esta es una cinta muy entretenida, pero debió concentrarse más en ser su propia aventura, en vez de querer extenderse por quién sabe cuánto tiempo.

​EL DATO

Director: David Yates

Elenco: Eddie Redmayne, Katherine Waterston, Dan Fogler, Alison Sudol, Ezra Miller, Colin Farrell.

Género: Fantasía / Aventuras

Clasificación: B

Duración: 133 minutos